Dónde comer en Roma: restaurantes y más (por una italiana)

Vale, hay muchas cosas que ver en Roma, pero no tomarse un tiempo para disfrutar bien de su gastronomía sería un error imperdonable. Y es que comer unos buenos tonnarelli cacio e pepe es tan importante como visitar el Coliseo, ¿o no? Así que aquí van nuestras recomendaciones de restaurantes donde comer en Roma. Restaurantes y otros lugares con las típicas tres “b’s”: buenos, bonitos y baratos. En realidad lo del bonitos a nosotros no nos interesa tanto… y baratos, pues algunos más que otros.

Tras muchos viajes, el último de casi un mes, a la capital de mi país, hemos probado unos cuantos, gracias a las sugerencias de gente local. Porque la comida romana es una delicia… pero no en cualquier sitio, ¡cuidado con las trampas para turistas!

Qué comer en Roma: platos típicos de la cocina romana

Primera regla: si vas a Roma intenta comer los platos típicos locales. OK, estás en Italia, pero, como ya comenté al hablar de gastronomía italiana, cada región de mi país tiene sus platos típicos. Esta no es tierra de risotti ni de tagliatelle al ragù –la versión original de los espaguetis a la boloñesa–, aunque hay restaurantes donde también podrás probarlos.

El plato típico romano más conocido son los spaghetti alla carbonara –¡no, no llevan nata!–, pero hay muchísimos más. Te hablamos de algunos de ellos en nuestro artículo sobre platos típicos de la cocina romana.

Dónde comer en Roma: tipos de restaurantes

Antes de que te estreses leyendo los nombres, llega el momento de explicar los distintos tipos de restaurantes que hay en Roma y, por extensión, también en toda Italia. Osteria, trattoria, taverna, tavola calda… qué no cunda el pánico. Para que sepas dónde te estás metiendo –ojo, que en todos puedes comer estupendamente– escribimos Comer en Italia, tipos de restaurantes y menú.

Consejos y recomendaciones a la hora de elegir un restaurante en Roma

La cantidad de turistas que viajan a Roma es tal que permite que incluso lugares en los que se come francamente mal se mantengan abiertos… y llenos. Sí, tengo que admitir que ha sido en Roma donde peor he comido en un restaurante. No te fíes de los manteles a cuadros –que, hasta hace años no se veían en Italia, pero ahora son el “uniforme”–. Nuestra recomendación es que te fijes en la clientela. Cuantos más locales veas sentados en sus sillas, más posibilidades hay de que la comida sea buena. Y en el menú: desconfía de “platos típicos” poco romanos y muy de restaurante italiano en el extranjero: si ves que tienen spaghetti bolognese, ¡huye!

Por otro lado, como siempre, déjate aconsejar por los que viven allí. A pesar de que muchos romanos nos dijeron que ellos no van al centro para nada, ni siquiera para comer, siempre es posible sacarles una recomendación concreta. Ese lugar al que van cuando tienen algo que celebrar, un pequeño restaurante en el centro que todavía tiene un aire familiar, la pizzería por la que merece la pena desviarse al caminar por la ciudad o el mejor tiramisù que han probado nunca.

Si lo tuyo no es ponerte a charlar en italiano… pues sigue leyendo, que te diremos unos cuantos buenos restaurantes donde comer en Roma. A nosotros nos los han aconsejado romanos de pura cepa o gente que lleva viviendo ahí unos cuantos años –yo tengo familia y amigos en Roma–.

Comer bien cerca del Vaticano: restaurante La Tavernella

Aprovechamos la parada en nuestro tour combinado de Vaticano más Coliseo, Foro y Palatino para ir a comer a un restaurante que nos habían recomendado cerca del Vaticano: La Tavernella. Bueno, cerca, pero tampoco en la plaza de San Pedro, a algo más de un cuarto de hora andando.

¿Lo bueno? Que ese kilómetro y medio de distancia hace que no esté saturado, que los precios no estén inflados y que puedas comer con tranquilidad en un ambiente casi familiar. Allí fue donde probamos nuestros primeros tonnarelli cacio e pepe –inolvidables– y unos también deliciosos spaghetti alla carbonara.

Dirección: Via Ezio, 6
Precio: Los platos de pasta cuestan 8 €
Web: No tiene

Comer bien en pleno centro de Roma: trattoria Da Gino al parlamento

A dos pasos de la cámara de los diputados de Roma está la trattoria Da Gino al parlamento –dejando claro su localización desde el nombre–. Nosotros pasamos por allí cuando no había sesión, pero estamos seguros de que más de una de sus señorías se dejará caer para probar su cocina romana.

La especialidad de la casa son los tonnarelli alla ciociara, con champiñones, guisantes frescos y panceta. Y podemos asegurar que saben hacerla… ¡qué recuerdos! Tampoco les salen mal los tonnarelli cacio e pepe. A mí los callos no me gustan, pero JAAC disfrutó como un enano con la trippa alla romana –callos con tomate y queso pecorino– mientras yo probaba el abbacchio alla cacciatora –una receta de cordero típica romana–. Todo fantástico. Un consejo: reserva antes, para no tener que esperar en la puerta, y ten en cuenta que no se puede pagar con tarjeta.

Dirección: Vicolo Rosini, 4
Precio: Los platos de pasta van de 10 € a 12 €, los segundos de 12 € a 14 € –12 € la trippa y 14 € el abbacchio–.
Web: No tiene

Comer bien y barato también en el centro: Zucchero & Farina

Si te digo que Zucchero & Farina es una tavola calda ya deberías saber qué es –¿has hecho los deberes y leído nuestro artículo de tipos de restaurantes en Italia?–. ¿Cómo lo descubrimos? Por un local. Concretamente mi primo –el de Castel Sant’Angelo– que come allí antes de entrar a trabajar y al que acompañamos un día.

No encontrarás muchas comodidades, no hay mesas, es comida para llevar, aunque hay una barra en la pared con taburetes. Lo que sí encontrarás son platos de comida casera, abundantes y económicos –todos a 5 €– y gran variedad de pizzas –porciones entre 1,50 € y 2 €– . Además, comida para picar como supplì o croquetas por menos de 2 euros. ¿Cosas que podrían mejorar? Eliminar los platos y cubiertos de plástico de un solo uso…

Dirección: Via dei Banchi Vecchi, 105
Precio: Con 8 € comes un entrante y un plato de pasta.
Web: No tiene

Trattoria Felice a Testaccio: los míticos tonnarelli cacio e pepe

Ese momento en que, después de haber comido un plato unas cuantas veces en distintos lugares, descubres que todos eran buenos… pero que has encontrado el Santo Grial. Eso nos pasó con los tonnarelli cacio e pepe de Felice a Testaccio. Si ya nos encantaba unos de los platos típicos de Roma por excelencia, en Felice a Testaccio alcanzaron un nuevo nivel. Delicioso se queda corto, pero no es solo la receta, es el ritual: llevan el plato a tu mesa y es el propio camarero el que mezcla el queso con la pasta a base de darles vuelta con un tenedor y una cuchara mientras tu estómago se prepara para lo que los ojos ya están comiendo.

Y no somos nosotros los únicos que piensan que esos tonnarelli son de otro nivel, Benigni –el director de La vida es bella– también considera que no se puede viajar a Roma sin ir a probarlos. Los spaghetti alla carbonara también son cosa fina y, para los que les gusten como a mí, las alcachofas a la romana –carciofi alla romana– con su aceite de oliva tampoco pueden faltar, aunque son 7 € la unidad.

Dirección: Via Mastro Giorgio, 29
Precio: Los platos de pasta tienen un precio de entre 11 € y 13 € y los segundos de 14 a 18 €.
Web: feliceatestaccio.it

Giggetto al Portico d’Ottavia: comer en el antiguo gueto judío

Giggetto al Portico d’Ottavia es uno de nuestros restaurantes favoritos de Roma, aunque tenemos que decir que últimamente cada vez hay menos locales en sus mesas –habrá que preguntar dónde van ahora–. Eso sí, tengo que advertir que no es particularmente económico, aunque tampoco sea de los restaurantes caros.

¿Qué mejor lugar para probar las alcachofas a la judía –carciofi alla giudia– que en el antiguo gueto? Allí es donde está el restaurante. Eso sí, hay que reconocer que los 6 € que cuesta cada una puede quitarte las ganas… pero merece la pena darse el capricho.

Obviamente, JAAC no es fan de Giggetto al Portico d’Ottavia por las alcachofas… A él, y a mí también, lo que le gusta son los spaghetti alla carbonara y los bucatini all’amatriciana. Simplemente deliciosos, el guanciale frito bien crujiente de la carbonara es insuperable.

Dirección: Via del Portico d’Ottavia, 21/a
Precio: Los spaghetti alla carbonara y los bucatini all’amatriciana cuestan 14 € cada uno
Web: giggetto.it

El Mercato Centrale: nuestro vicio al lado de Termini

Una perdición frente a la que pasamos dos veces al día, como mínimo, durante nuestras tres semanas en Roma. El sitio perfecto: un plato de pasta, una pizza, un panino, un dulce, un helado… Al lado de la estación de Roma Termini se encuentra el Mercato Centrale. El antiguo comedor de los trabajadores del tren convertido en un mercado gastronómico en el que, con unos precios muy ajustados, disfrutar de la gastronomía con mayúsculas.

Fue el responsable de alguno de los kilos que nos trajimos de vuelta de la Ciudad Eterna… y se nos hace la boca agua recordando los buenos momentos que pasamos allí. Si quieres saber cuáles eran nuestros platos favoritos, echa un vistazo a Las delicias que nos enamoraron en el Mercato Centrale Roma.

Pastificio Guerra: comer barato cerca de Plaza de España

Hasta ahora todas las recomendaciones han sido basadas en la calidad y en el sabor de la comida. Sin embargo, el Pastificio Guerra, muy cerca de la Plaza de España, entra en nuestra lista solo con la premisa de que es muy barato. Una parada para matar el hambre por poco dinero, pero que nos dejó con un sabor de boca triste.

Nos habían hablado del lugar, de su pasta fresca hecha al momento y de la decoración de pastificio de toda la vida –eso sí, no había sido un romano sino un español, en este caso–. Pero lo que no nos habían dicho –o puede que haya pasado después– es que está lleno de turistas que esperan su plato de pasta como en la cola de una cárcel. Y eso es lo que parece la comida: rancho servido por dos guardias. Dos guardias poco dispuestos a responder a tus preguntas –incluso a “¿qué salsa lleva la pasta?”–. De hecho, nos pareció que casi no hablaban ni italiano ni inglés. Dos tipos de pasta con su salsa correspondiente a elegir y que no cambian hasta que no se acaba la fuente. No preguntes cuál saldrá después… nadie lo sabe.

En el local no hay mesas, es comida para llevar, lo que hace que los alrededores estén llenos de gente sentada en cualquier parte para comer su pasta. Ojo, no pienses en llevarte tu tupper de plástico –sí también es todo plástico de un solo uso– a las famosas escaleras de la Piazza di Spagna, está prohibido sentarse en los peldaños, bajo pena de multa –puedes leer aquí la noticia–.

Tan poco nos gusta, que ni foto hicimos. Y, si tan poco nos gusta, ¿por qué lo ponemos? Porque mucha gente lo recomienda –incluso en la Lonely Planet– y queríamos dar nuestra opinión. Es solo –y tampoco tanto, por 5 € hay buenos platos de pasta en muchos sitios– barato.

Dirección: Via della Croce, 8
Precio: 4 € el plato
Web: No tiene

Comer en Trastevere bien y barato: restaurantes y más

El barrio de Trastevere es uno de los lugares donde mejor comer en Roma, pero también donde es más fácil que te timen con una mala comida a precio alto. Si recuerdas que he dicho que fue en Roma donde peor he comido en un restaurante… era uno de Trastevere. Así que echa un vistazo a nuestras recomendaciones para sobre dónde comer en Trastevere y ve sobre seguro.

Un listado rápido de los sitios por los que pasamos nosotros, siguiendo las recomendaciones de locales: las trattorie Da Lucia y Da Augusto; Trapizzino Trastevere, para picar algo rápido; y la pizzería “al taglio” –al corte– Dar Poeta, aunque también tiene una pizzeria “de mesa”. Otra de las pizzerias más famosas de Roma, Ivo a Trastevere, también está aquí aunque no tuvimos tiempo de probarla.

Ya que estás en el barrio, echa un vistazo a nuestro artículo 8 cosas que hacer y que ver en el Trastevere para aprovechar el «viaje».

Las mejores pizzas de Roma

Aviso a navegantes: la pizza, en principio, no es un plato típico romano. A pesar de haberse hecho famosa y de servirse en todo el país, la pizza sigue siendo napolitana. Así que, ¿dónde comer algunas de las mejores pizzas de Roma? En pizzerías napolitanas. No te pierdas la sede romana de L’Antica pizzeria da Michele, una de las pizzerías más famosas de Nápoles, con su a’pizza fritta. Ni las del horno de leña de Pier Daniele Seu en el Mercato Centrale, que no es 100% napolitana pero está deliciosa. También nos hablaron de las de L’Angolo di Napoli y de Lo Scoglio di Frisio, pero no nos dio tiempo a probarlas.

Venga que no se me enfaden los romanos, también hay una pizza romana. La diferencia con la clásica napolitana es que es más fina y crujiente y tiene el borde más bajo y “quebradizo”, comparado con el más gordo y esponjoso de la napolitana. De este tipo, probamos la de Da Remo, en el barrio de Testaccio, una de las más famosas de la ciudad junto con Ivo a Trastevere y La Montecarlo que dejamos para otra ocasión. En Pigneto, donde nos alojamos la última vez unas semanas, fuimos más de una vez a comer en la Pizzeria da Simone, buena y barata.

Respecto a las pizzas al corte, además de Dar Poeta, probamos las de Alice Pizza en diferentes locales y también nos encantaron.

Los mejores helados de Roma

No podemos dejar de mencionar los helados en cualquier artículo sobre comida en Italia. Es uno de los “platos” nacionales y los gelati artigianali son un imprescindible en el país. Pero, gustándonos tanto… no podíamos dejar de dedicarles un artículo a las mejores heladerías de Roma. Vale, solo son las que están en el centro, pero ¿qué mejor que un helado entre el Coliseo y el Panteón? Solo de pensar en ellas se me hace la boca agua…

El postre (tiramisù y maritozzi) y el café

Uno de los dulces típicos italianos por excelencia es el tiramisù y, como todos los romanos te dirán, el mejor para comer al volo –por la calle– es el de Pompi. Una cadena de pastelerías, hay seis en Roma ciudad, que están especializadas en ellos: clásico, de fresa, de pistacho, de avellanas, de plátano y chocolate… ¡si hasta tienen de piña colada! Todos al precio de 4 € y, al menos el clásico que probamos nosotros –y lo probamos en tres de sus tiendas–, delicioso. Por cierto, si te enamora y estás en Londres, también tienen una sucursal en la capital inglesa.

El dulce más típico de Roma, aunque este limitado al desayuno –en muchos sitios no lo encontrarás por la tarde–, es el maritozzo con la panna. Una especie de bamba de nata que te da energías para caminar por Roma sin parar hasta la hora de comer. Nuestro favorito es el de la Pasticceria Regoli.

Nosotros no somos muy amantes del café –yo dejé de tomarlo cuando salí de Italia y he perdido la costumbre–, pero también nos aconsejaron un par de lugares en donde disfrutar de un auténtico café italiano: La Casa Del Caffè Tazza D’oro y Sant’ Eustachio Il Caffè. Eso sí, recuerda que el café en Italia es cosa seria, echa un vistazo a nuestro artículo Tipos de café en Italia: espresso, cappuccino y más…

Mapa con los restaurantes donde comer en Roma

Para que te sitúes y sepas en todo momento qué lugar para comer bien en Roma tienes cerca, hemos preparado un mapa con todos los restaurantes, pizzerías, heladerías y más de las que te hemos hablado. Verás que siempre encuentras uno cerca cuando tengas hambre en la Ciudad Eterna.

Vas a necesitar caminar mucho para tener hambre… porque ganas de comer no te van a faltar mientras estés en Roma.