Puede que no sea tan famoso como el Coliseo o la Basílica de San Pedro, pero el Panteón de Agripa tiene un lugar entre las cosas que ver en Roma por derecho propio. No todos los días puede uno visitar un edificio romano con casi 2.000 años de antigüedad. Y no es un edificio romano cualquiera, es el mejor conservado de la ciudad. Una obra maestra de la arquitectura.
Solo los romanos podían construir una cúpula circular de un tamaño como la del Panteón. Una cúpula que, a día de hoy, sigue siendo la mayor del mundo sin hormigón armado –con hormigón armado solo se superó en el siglo XX–. Pero, además de la arquitectura, hay otros motivos para entrar: tumbas reales, estatuas, frescos, mármoles, mosaicos… Prepárate para alucinar, una de las joyas de Roma te espera.
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Un poco de historia del Panteón de Roma
A pesar de que en Roma las paredes son realmente antiguas, pocas podrían contar tantas cosas como las del Panteón. Utilizado de forma ininterrumpida desde su construcción, atesora historia como para llenar varios libros. Mejor la resumimos…
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Llegarás hasta la piazza della Rotonda con un objetivo claro, pero, antes de entrar en el Panteón, no dejes de fijarte en ella, una de las plazas más bonitas de Roma.
¿Panteón de Agripa o de Adriano?
Vaya por delante que, a pesar de ser conocido como el Panteón de Agripa… no es “suyo”. Es cierto que Marco Agripa mandó construir el primer Panteón en el año 27 a.C. para conmemorar la batalla de Actium. Pero también es cierto que ese primer edificio ardió hasta los cimientos en el año 80 d.C. Treinta años después, Domiciano lo volvió a levantar… para que un rayo lo destruyera en el año 110.
¿Sabías que…?
La palabra panteón deriva del griego pan, todos, y theon, dioses. En su origen, era un templo dedicado a todos los dioses. Hoy en día, la palabra también hace referencia a un monumento funerario destinado a enterramiento de varias personas.
El que se alza orgulloso en la Piazza della Rotonda –los romanos lo conocen como La Rotonda– lo mandó construir entre los años 118 y 125 el emperador Adriano. Sí, el de la mole adriana, hoy Castel Sant’Angelo. ¿Cuánto del diseño es de la época Adriano y cuánto es inspiración de los edificios anteriores? No se sabe…
¿Por qué se conoce entonces como Panteón de Agripa y no como Panteón de Adriano? Porque Adriano ya tenía su mole… No, es broma. Una inscripción sobre la entrada –M.AGRIPPA.L.F.COS.TERTIUM.FECIT– daba a entender que era obra de Agripa. Y así se asumió hasta unas excavaciones en el siglo XIX que descubrieron restos de un templo anterior. Fue entonces cuando se dedujo que Adriano había colocado la inscripción original en su nuevo templo.
De la consagración a la actualidad
Fue en el año 608 cuando el templo de todos los dioses pasó a ser, en exclusiva, el de la Virgen María –el nombre actual es Basilica di Santa Maria ad Martyres, una de las iglesias que ver en Roma–. El emperador bizantino Focas se lo regaló al Papa Bonifacio IV y se acabaron las deidades paganas.
El discreto aspecto exterior del Panteón se debe, en gran medida, a otro Papa: Urbano VIII. El techo de bronce que cubría el pórtico se convirtió en cañones para Castel Sant’Angelo y en material para el baldaquino de Bernini en la Basílica de San Pedro.
¿Sabías que…?
Hay un dicho en Roma que reza: “Lo que no hicieron los bárbaros, lo hicieron los Barberini”. Uno de los miembros de la familia Barberini era Urbano VIII. Él y otros Barberini, esquilmaron las riquezas de edificios de Roma que habían sobrevivido a las invasiones bárbaras para construir los suyos.
Además de su función como iglesia, que aún conserva, se convirtió en Panteón Real con la unificación de Italia. En su interior se encuentran las tumbas de los primeros reyes del país. Antes ya reposaba el gran Rafael.
Maravilla de la arquitectura: la cúpula del Panteón de Agripa y su óculo
Como decía, los Barberini se encargaron de que, a día de hoy, el exterior del Panteón no brille. Pero eso no le quita grandiosidad: las 16 columnas corintias construidas con una única pieza de granito egipcio –una pieza cada columna– de 11,6 metros de altura o las dos puertas de 7 toneladas lo dejan claro.
El frontón y las dimensiones de la plaza impiden ver desde fuera la cúpula en toda su extensión. Hablamos de una semiesfera perfecta cuyo radio es igual a la altura del cilindro sobre el que se asienta: 21,65 m –en pies romanos tenía más sentido: 75–. El interior de la cúpula está formado por cinco filas de casetones que aligeran el peso. No se construyó una cúpula circular más grande hasta el siglo XX y gracias al hormigón armado –el Pabellón del Centenario de Wrocław, Polonia–. De hecho, a pesar de que Miguel Ángel la estudió, la cúpula de San Pedro es más pequeña.
¿Sabías que…?
Brunelleschi también se basó en la cúpula del Panteón de Roma para la del Duomo de Florencia. Aunque más grande, 22,75 m de radio, es una cúpula octogonal.
Te parecerá más pequeño de lo que es, pero el óculo –el orificio del centro de la cúpula– mide nada más y nada menos que 8,7 m de diámetro. Los más de 40 metros de altura y el efecto óptico de las filas de casetones cada vez más estrechas engañarán a tu cerebro. Y, ¿no se cuela el agua de lluvia por ahí? Sí y, recorriendo los jardines del Vaticano, nos dijeron que en Roma llueve un 30% más que en Londres. Fíjate en el suelo, verás los sumideros, 22 en total, por los que sale el agua de lluvia hacia las cloacas bajo el edificio.
Curiosidades del óculo del Panteón de Agripa
La posición del óculo convierte al Panteón en un gigantesco reloj solar en el que la hora la marca la posición de la luz en la pared interior del edificio.
Además de la hora, también deberías tener en cuenta el calendario al visitar el Panteón de Agripa. Dos días al año podrás disfrutar de un espectáculo único:
- el día de Pentecostés los bomberos lanzan pétalos de rosas rojas desde el óculo simbolizando el descenso del Espíritu Santo;
- el 21 de abril –Natale di Roma, cumpleaños de Roma–, la luz del sol incide directamente sobre la puerta de entrada al mediodía.
El interior del Panteón
La arquitectura del Panteón ya es motivo suficiente para entrar, pero es que hay más. Lamentablemente, la decoración original ha desaparecido a lo largo de los siglos –los dioses romanos no eran bien vistos por la Iglesia Católica–. A cambio, llegaron imágenes religiosas y grandes monumentos funerarios.
Son siete las capillas, alternándose circulares y rectangulares, a lo largo del muro del edificio –la octava sería la puerta de acceso–. Entre las capillas, ocho edículos decorados con estatuas.
¿Sabías que…?
Hay espacio más que suficiente para las capillas interiores, los muros del Panteón tienen una anchura de casi ¡6 metros!
Las tumbas del Panteón de Agripa
Dos reyes de Italia están enterrados en el Panteón: Vittorio Emanuele II y Humberto I. El primer rey de la Italia unificada, conocido como el padre de la patria que trasladó la capital del país de Turín a Roma –pasando por Florencia– y su hijo, acompañado de su mujer Margarita de Saboya. Las tumbas las mantiene el instituto nacional de la guardia de honor de las tumbas reales del panteón, Istituto Nazionale per la Guardia d’Onore alle Reali Tombe del Pantheon.
¿Sabías que…?
El tercer rey de Italia, Vittorio Emanuele III, no está enterrado por su apoyo tácito a Benito Mussolini: huyó del país durante la Segunda Guerra Mundial. Su hijo, Humberto II, es conocido como el “rey de mayo”, fue coronado el 9 de mayo de 1946 y el 2 de junio de ese mismo año los italianos eligieron la república como forma de gobierno.
Pero, antes que los reyes, ya estaba enterrado un grande del arte universal: Rafael, Raffaello Sanzio –un paisano de Sara, de Urbino, en Las Marcas–. Él mismo fue quien eligió este lugar para su tumba y quien encargó para su decoración la escultura La Virgen de las Rocas a Lorenzetto.
Además de estas, hay más tumbas en el interior del Panteón, sin olvidar las reliquias de mártires anónimos que fueron colocadas en el edificio para su consagración. Recuerda que es la Basilica di Santa Maria ad Martyres.
Información práctica: horarios del Panteón
El Panteón abre todos los días del año excepto el 1 de enero, el 1 de mayo y el 25 de diciembre, de 8:30 a 19:30 de lunes a sábado y de 9:00 a 18:00 los domingos. Los festivos, no domingos, abre de 9.00 a 13.30. Ten en cuenta que la última entrada es quince minutos antes del cierre. Además, sigue siendo un templo católico y, como tal, se celebran misas en su interior.
¿Precios y entradas del Panteón? No, ¡es gratis!
A principios de 2017, el gobierno italiano se planteó cobrar una entrada de entre 2 y 3 euros. La ley nunca se aprobó y, a día de hoy, el acceso al Panteón sigue siendo gratis.
¿Sabías que…?
Todas las iglesias de Roma son gratuitas y el Panteón no iba a ser una excepción.
2.000 años de historia te esperan bajo la cúpula más grande de Roma.
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