Vale, cinco cosas son muy pocas y Lima es una de las ciudades más interesantes de Sudamérica, con mil cosas que ver, visitar y disfrutar. Pero vamos a mojarnos un poco y a darnos nuestras cinco favoritas. En nuestro segundo pasos por la ciudad después de cuatro años, seguimos empapándonos de su rica historia y cultura pero decidimos probar también algo diferente… Y entre las dos visitas podemos dejarnos nuestro top-5, los imprescindibles, lo que no os podéis perder, vamos… ¡lo mejor de lo mejor!
Una visita al museo Larco, uno de los mejores de Sudamérica
Después de recorrer el norte del Perú conociendo más sobre las impresionantes culturas Chachapoyas, Moche, Lambayeque y Chimú, y de nuestra primera visita por el sur de Perú maravillándonos con las obras de los Nazca o de los Paracas, recorrer el Museo Larco nos ayudó a comprender el porqué esas culturas eran casi desconocidas en el extranjero –en ese sentido este video que se puede ver en el museo es revelador– y a apreciarlas y conocerlas aún más profundamente, junto con las otras culturas preincaicas. Un museo que inexplicablemente nos habíamos perdido en nuestra primera visita, error que no podíamos repetir y al que pusimos remedio. Didáctico y al mismo tiempo entretenido, ha sido sin duda uno de los mejores museos que hemos visitado en Sudamérica.

Museo Larco – Lima – Perú
Rafael Larco Hoyle se considera uno de los fundadores de la arqueología peruana, habiendo postulado una de las cronologías para las culturas precolombinas más reconocidas hoy en día. Sin ser arqueólogo, heredó de su padre el amor por las culturas precolombinas y su legado es hoy el museo que lleva su nombre. Con unos 45.000 objetos, es la mayor colección privada de arte precolombino del mundo. La “puerta de acceso al arte del antiguo Perú para aprender pero también para disfrutar”, la definió así Mariana Watson, Directora Relaciones Institucionales en Museo Larco, y nos pareció una definición muy acertada. Desde la Sala de la Ceremonia del Sacrificio donde se expone la famosa “pieza Larco” que explica toda la simbología de los personajes de la elite moche, pasando por la “Sala Erótica” –que en realidad no tiene nada de erótico, ya que el concepto de erotismo no existía, y es en realidad un himno a la fertilidad y al origen de la vida– o la Sala en la que se explica el origen del arcángel arcabucero en la iconografía católica de Perú… una revelación tras otra.

Museo Larco – Lima – Perú
Una vuelta en parapente en Miraflores
Después de nuestra primera fantástica pero sufrida experiencia en Medellín –el cielo se abrió justo una horita para que voláramos después de 4 días de espera y luego volvió a cerrarse– en Lima parecía repetirse lo mismo. Thomas Schwarzer, el genial instructor de Autana Perú que nos invitó a volar con él, nos llamó la mañana en la que teníamos que despegar para decirnos que el viento ya estaba bien pero, cuando estábamos de camino, volvió a llamar para decirnos que ya había bajado y no podíamos salir, que no fuéramos. Nuestro gozo en un pozo… pero no nos rendimos y fuimos al parapuerto de Miraflores junto al Parque del Amor porque estábamos seguros de que antes o después el deseado viento se levantaría… ¡y así fue! SENSACIONAL, ver el mar por un lado y por otro los rascacielos de la ciudad y llegar casi a tocarlos fue una experiencia inolvidable. ¡Recomendadísimo para todos los que visten Lima! Y es 100% seguro y no da nada de miedo, como nos dijo Thomas, “lo llaman deporte de aventura pero es como mecerse en una hamaca suspendida en el aire”.
Un tour gastronómico, disfrutar de la mejor cocina de Sudamérica
La cocina peruana tiene renombre a nivel mundial. En nuestra primera visita a Perú ya habíamos disfrutado de ella y en esta segunda no sólo seguimos haciéndolo sino que quisimos aprender más sobre sus orígenes, su historia y sus ingredientes. ¿Y qué mejor para eso que un tour gastronómico en Lima, capital del país y centro neurálgico de este gran desarrollo de la cocina peruana a nivel internacional?
Buscando agencias especializadas en tours gastronómicos y talleres de cocina encontramos Lima Mentor que nos invitó a realizar dos tours combinados: la visita al mercado del pescado –el terminal pesquero de Villa María– y un taller y demostración de preparación del ceviche en el restaurante Kapallaq cuyo chef Luís Cordero ha sido galardonado en múltiples ocasiones por preparar el mejor ceviche de Perú.
Fue un honor poder asistir a la preparación de un plato en apariencia tan sencillo por parte de tal maestro pero el resto del tour también fue revelador. Nuestro guía, Fernando, es un gran conocedor de la historia gastronómica de Perú sobre la que aprendimos muchísimo. Desde la importancia de la aportación a la cocina peruana de los inmigrantes extranjeros –españoles, africanos, chinos, italianos, japoneses, franceses…– a la de la cocina de hacienda y al origen de su gran reconocimiento a nivel mundial, que en gran parte se debe al gran chef Gastón Acurio. Fue él, por ejemplo, quien presentó por primera vez el ceviche al Madrid Fusión y le dio categoría a un plato que, hasta entonces, había sido consumido solamente por los pescadores.
El mismo Gastón fue el promotor de la Feria Gastronómica Internacional de Lima, Mistura, creada en 2009 y que se ha convertido ya en una de las tres ferias gastronómicas más importantes del mundo. Por cierto, podéis compraros la “Guía de Gastón, un dato para cada antojo” si queréis saber cuál es el mejor sitio para comer cualquier tipo de plato en la capital peruana.
Un paseo por el centro histórico
La que fue la ciudad más importante de Sudamérica en el periodo de la colonia, la capital del Virreinato de Perú, anterior Ciudad de los Reyes, conserva todavía mucho de su esplendor. Un paseo por la Plaza Mayor y sus calles aledañas –aunque en este caso no os sugerimos que «os perdáis» por ellas porque hay zonas poco seguras, o eso nos comentaron aunque a nosotros no nos lo pareció– será uno de los más agradables de los que se puedan dar en una ciudad sudamericana. Edificios coloniales bien mantenidos, calles bien cuidadas y ambiente actual, una mezcla sin duda atractiva.
Una visita a las catacumbas de San Francisco
El Museo del Convento de San Francisco de Asís de Lima es una de las visitas obligadas en la capital peruana por sus escalofriantes catacumbas. Las criptas abovedadas –que se conocen con el nombre de «catacumbas» por su parecido con las romanas– se han utilizado hasta principios del 1800. La cantidad de cráneos, tibias, fémures y demás huesos humanos que se pueden ver es impresionante. Visita obligada para los amantes de lo tétrico.