La cercanía a Tarragona y a la Costa Daurada puede que le quite parte del protagonismo que merece una de las ciudades más interesantes de Cataluña: Reus. Por lo menos, nosotros habíamos caído en esa “trampa” y no habíamos visitado un lugar que solo nos sonaba por ser cuna de dos genios muy distintos: Gaudí y Buenafuente. Afortunadamente, pusimos remedio a este gran error y solo podemos decir que hemos vuelto enamorados, sobre todo de sus edificios modernistas. No teníamos ni idea de que algunas de las joyas arquitectónicas de Lluís Domènech i Montaner se encontraban aquí. ¿Y tú? A lo mejor te sorprende como a nosotros todo lo que hay que ver en Reus…
Reus es también la ciudad del vermú. Parte de la riqueza que permitió a los burgueses levantar sus palacios modernistas venía del negocio de este licor del que Reus fue una de las capitales mundiales. El siglo XVIII fue el siglo del “Reus-París-Londres”, las tres ciudades en las que se fijaba el precio del aguardiente. Todavía esa cultura del vermú sigue muy viva en la ciudad catalana y atrae hasta a unos abstemios como nosotros.
Te llevamos a la ciudad catalana del modernismo y del vermú a través de nuestros 10 lugares que ver en Reus. Si todavía no la has visitado, esperamos convencerte.
¿Sabías que…?
Reus forma parte del Tramo 2 del Grand Tour de Cataluña. Si quieres saber más de esta ruta en coche por los lugares más icónicos de la comunidad, pásate por nuestro artículo sobre el Grand Tour de Catalunya.
1. La Casa Navàs
¿Sabías que en Reus puedes visitar uno de los mejores ejemplos del modernismo europeo? Pues nosotros, hasta poco antes de llegar y de investigar sobre los sitios que ver en Reus, tampoco teníamos ni idea. Pero sí, allí está la Casa Navàs, en plena Plaça del Mercadal, algo así como la plaza mayor de Reus. No lleva muchos años abierta al público: solo se puede visitar, siempre con visita guiada, desde 2018, cuando cerró la tienda de telas de sus dueños en la planta baja.
En la visita nos contaron que es la única obra modernista de Europa que ha llegado hasta nuestros días tal y como se estrenó. Y es que estuvo habitada hasta los años ‘90 del siglo XX y conserva el 90% de sus muebles originales, cerámicas, pinturas, tejidos de seda, lámparas, más de doscientos metros cuadrados de vidrieras… A pesar de que fue bombardeada en la Guerra Civil y la última de sus cinco plantas sufrió graves daños.
Es obra del gran arquitecto modernista Lluís Domènech i Montaner –el del Palau de la Música Catalana y del recinto modernista de Sant Pau de Barcelona, declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO–. La levantó entre 1901 y 1908 por encargo del rico comerciante de tejidos Joaquim Navàs y de su mujer, Pepa Blasco, quienes le dieron, literalmente, un presupuesto sin límites. ¿Te imaginas el genio de Domènech i Montaner con un presupuesto ilimitado? Pues eso…
Saltaconmiconsejo
Te recomendamos reservar tu visita guiada en la web de Casa Navàs antes de ir a Reus. Las plazas se agotan rápidamente.
2. El Institut Pere Mata
Hay otro edificio modernista que tienes que visitar en Reus y que te va a volar la cabeza: el Institut Pere Mata. También es obra de Domènech i Montaner y es ¡un hospital psiquiátrico! Es el primer hospital de este tipo que se construyó en España, a finales del siglo XIX, y una de las mejores instituciones psiquiátricas de Europa. Porque sí, sigue en activo, aunque una parte se haya convertido en museo y esté abierta al público. Domènech i Montaner lo proyectó antes del hospital de Sant Pau de Barcelona y fue el primer edificio modernista de Reus.
La parte que se visita es la más espectacular: el antiguo pabellón de los distinguidos. Era el pabellón dedicado a los pacientes más adinerados y, sin perder su funcionalidad, la decoración es una locura –perdón por el doble sentido–. De nuevo, muebles originales, enormes lámparas, una balaustrada que te recordará a la del Palau de la Música Catalana, esgrafiados, vidrieras y cerámicas de lo más coloridas e inspiradas en la naturaleza –la rosa de Reus es omnipresente–… Como haría con la Casa Navàs, Domènech i Montaner trabajó con los mejores ceramistas, mosaiquistas, forjadores, ebanistas, escultores y vidrieros del momento. Creerás que estás en un hotel o en un balneario más que en un hospital.
El Institut Pere Mata está un poco alejado del centro, pero se llega en transporte público con el autobús L30. Aquí no hace falta reservar: la visita es con audioguía. Gracias a ella nos enteramos de datos curiosos como que en 1904 lo visitó Alfonso XIII y se topó con un paciente que creía ser el rey de España… Por lo visto, Alfonso XIII le dijo que él era el rey de Inglaterra.
3. El resto de la Ruta del modernismo de Reus
La Casa Navàs y el Institut Pere Mata son parte de la Ruta del modernismo de Reus, un recorrido por la ciudad a través de sus alrededor de ochenta edificios catalogados. Frente a cada uno de ellos hay una placa con su nombre, el del arquitecto y su año de construcción. Puedes ir siguiendo la ruta con el mapa que encontrarás en la oficina de turismo. Más de la mitad son de Pere Caselles i Tarrats, antiguo arquitecto municipal de Reus.
Algunas de nuestras favoritas son la Casa Anguera y la Casa Tomàs Jordi, ambas de Pere Caselles i Tarrats y ambas decoradas con la rosa de Reus. Otras imprescindibles son la Casa Laguna, con sus azulejos, del mismo arquitecto, la Casa Bartolí de José Subietas, las Casa Gasull y Casa Rull de Domènech i Montaner y el curioso dispensario antituberculoso de Joan Rubió. Te ponemos todos los edificios de la ruta en el mapa.
Rincón Salta Conmigo
Siguiendo la Ruta del modernismo también te encontrarás con otros edificios no modernistas muy interesantes. Como el Palacio Bofarull –con su portada barroca–, la iglesia neogótica de Sant Joan o el del Jueu del Raval con su figura satírica.
4. La iglesia prioral de Sant Pere
No todo iba a ser modernismo. El siguiente lugar que ver en Reus tiene unos cuantos siglos más de historia. Hablamos de la iglesia más antigua de la ciudad: la prioral de Sant Pere. Esta iglesia de estilo gótico tardío se levantó en el siglo XVI sobre una iglesia románica. Cuando entres, date la vuelta y fíjate en su rosetón. La figura de San Pedro, por otro lado, no podrás verla: está en su arca y solo sale en la procesión de la Fiesta Mayor de Reus, el 29 de junio.
La iglesia está vinculada con dos grandes artistas reusenses. Por un lado, cómo no, Gaudí, que fue bautizado aquí, una placa lo recuerda en la primera capilla a la izquierda. Y, por el otro, con Mariano Fortuny, cuyo corazón está conservado en la Capilla del Santísimo, donde encontrarás la inscripción “Dio el alma al cielo, su fama al mundo, el corazón a su patria”.
Rincón Salta Conmigo
Junto a la iglesia, no te pierdas la Plaça Peixateries Velles, antiguo mercado del pescado construido sobre un cementerio, y el Castell del Cambrer, del siglo XII, hoy centro cultural.
5. El campanario de Sant Pere y la escalera que inspiró a Gaudí
Lo más llamativo de la la iglesia prioral de Sant Pere es su campanario que, con sus 63 metros de alto, es visible a kilómetros a la redonda y se considera uno de los símbolos de Reus. Se puede entrar. Y nosotros, cómo no, subimos. Pasamos por la sala de los Guardadors de la Tronada –la cofradía de la Fiesta Mayor de Reus–, la sala de los pesos para dar cuerda al reloj, la sala del campanero… para llegar a las campanas y las vistas. Alcanzan hasta Salou, Cambrils, Portaventura y Ferrari Land a lo lejos. En los días claros, según nos dijeron, ¡se ve hasta Mallorca!
La visita es, de nuevo, con audioguía y gracias a ella, entre otras cosas, nos enteramos de que Gaudí subía a menudo para contemplar ese paisaje, su luz y ver al campanero tocar las campanas. Si la espiral de sus escaleras te recuerda algo, es que sirvió de inspiración para las de las torres de la Sagrada Familia.
6. El Gaudí Centre Reus
Entre los lugares que visitar en Reus, no podemos olvidarnos del Centro Gaudí, el “homenaje que la ciudad natal de Gaudí dedica a su hijo más universal”, como ellos mismos lo describen. El Gaudí Centre Reus es el único centro de interpretación dedicado al gran arquitecto catalán, un viaje por su vida –incluyendo su relación con Reus– y su obra.
Nos encontramos, entre otras cosas, con maquetas táctiles e interactivas; un audiovisual en 360º para acercarnos a las obras de Gaudí; recreaciones de espacios como el estudio de Gaudí dentro de la Sagrada Familia; una reproducción a escala de la cúpula del Palau Güell; una copia de la famosa maqueta funicular de la iglesia de la Colonia Güell que tardó 10 años en preparar, y paneles con un montón de curiosidades. Entre ellas, por ejemplo, que Gaudí trabajó en el proyecto de un gran hotel en Nueva York o en el de una misión en Marruecos. O que el diseño del campanario de la iglesia de esta última era un claro predecesor de las torres de la Sagrada Familia.
Saltaconmiconsejo
En el mismo edificio del Gaudí Centre Reus está la oficina de turismo, donde puedes comprar la pulsera turística Visit Reus que, por 15 euros, incluye la entrada al mismo Centro Gaudí, al Institut Pere Mata, al campanario de Sant Pere, al Museo de Reus y al Museo de Arqueología. Además de hacerte con el mapa de la Ruta del modernismo.
7. La escultura “El Nen: Gaudí adolescente”
Gaudí, hijo, nieto y bisnieto de caldereros de Reus, se trasladó a Barcelona con solo dieciséis años y no fue profeta en su tierra: no hay ninguna obra del gran arquitecto en su ciudad natal. En el Gaudí Centre Reus nos enteramos de que se le encargó la reforma de la fachada del santuario de la Misericordia, pero solo preparó el diseño –diseño que se conserva en el Museu de Reus–. Por eso lo recuerdan así, de joven, con la escultura “El Nen, Gaudí adolescente”. Está en el Carrer de l’Amargura, muy cerca de su casa natal, indicada con una placa conmemorativa.
¿Sabías que…?
Aunque no haya ninguna obra de Gaudí en Reus, sí que hay una “Ruta Gaudí”. Además de esta estatua, de su casa natal, de la iglesia de Sant Pere y del santuario de la Misericordia, incluye el Instituto Salvador Vilaseca: el antiguo colegio de las Escuelas Pías. Aquí estudió el joven Gaudí y participó en la revista El Arlequín, de la que se conservan algunos ejemplares con dibujos del arquitecto.
8. La Estación Enológica
Otro de los edificios modernistas de Reus es la Estación Enológica, el “kilómetro cero del paisaje del vino y de los productos agroalimentarios del sur de Cataluña”. Desde 1907 se ha dedicado a la investigación y al desarrollo de las seis DOs de vino de esta zona, del aceite de oliva DO Siurana y de la DO avellana de Reus.
En la planta baja está también la Casa del Vermut y el Vino, donde aprendimos más sobre los tipos de vermús y sus ingredientes, el origen de su nombre, su historia y la importancia que ha jugado Reus en ella.
¿Sabías que…?
Un par de curiosidades. Al considerarse una bebida medicinal, el vermú burló la ley seca en EEUU. Y puede haber hasta 180 botánicos diferentes en un mismo vermú. En el Vermouth Iris Rojo De Muller hay más de 150 y son “secretos”.
Además, probamos las avellanas y el aceite de Siurana, ¡qué ricos! Antes de que lo preguntes, sí, lo que se cata normalmente son los vermús, pero es que no bebemos…
9. La visita a una bodega de la Ruta del vermut de Reus
En la Estación Enológica nos enteramos de que en el siglo XIX llegó a haber cincuenta y seis marcas de vermú de treinta productores diferentes en Reus. Ahora sigue habiendo ocho marcas de tres productores diferentes que siguen elaborando el vermú de forma tradicional y son parte del sello Vermut de Reus: Miró, Yzaguirre, Iris, Rofes, Cori, Olave, Fot-li y Or del Camp.
Las bodegas de De Muller, Miró e Yzaguirre, en las afueras de Reus, son visitables algunos días de cada mes. Y en pleno centro está Vermut Rofes, hoy transformada en restaurante. Estas visitas, junto a la de la Estación Enológica, son parte de la Ruta del vermut de Reus, que también cuenta con tours guiados temáticos. Tienes toda la información –en catalán– en la web de turismo de Reus.
10. El Museu del Vermut
Otra de las etapas de la Ruta del vermut de Reus es el Museu del Vermut. Un lugar más que une modernismo y cultura del vermú. Y es que en esta antigua fábrica modernista de gorras se encuentra el primer museo del vermú del mundo, con la mayor colección del planeta de artículos relacionados con el vermú. ¡Más de 6.000! Todo empezó con una botella de la marca italiana Cinzano en 1982 y ahora hay botellas y objetos de todo tipo procedentes de 56 países y de 2.000 marcas diferentes. Más de 1.800 botellas, 400 carteles, 3.000 etiquetas y más objetos, desde postales hasta bandejas pasando por vasos, ceniceros o chapas. Nos entretuvimos un buen rato curioseando…
El museo es de entrada gratuita y es que también es vermutería y restaurante. La colección está expuesta en las salas donde tomarte un vermú y comer. Te aseguramos que se come muy bien, ¡cómo estaban esas croquetas, esas patatas con cheddar fundido y bacon, esa coca de sobrasada y miel, esos choricitos al vermú Cori rojo, esos canelones, ese brownie! Salivo solo con pensarlo… Y, además, bastante bien de precio.
Mapa de los lugares que ver en Reus
Aquí tienes nuestro clásico mapa con los lugares que ver en Reus, para que no se te escape ni uno en tu visita a la ciudad catalana.
Dónde dormir en Reus: Brea’s hotel
Nosotros dormimos un par de noches en el Brea’s hotel. Está un poco alejado del casco histórico de la ciudad, a un cuarto de hora paseando, y es ideal si llegas en coche para aparcarlo. Tiene habitaciones amplias y cómodas, una muy buena relación calidad-precio y un desayuno bastante variado. Aquí puedes ver sus precios y disponibilidad y aquí la de otros hoteles de Reus, si no te convence. Nosotros estábamos indecisos entre este y el NH Ciutat de Reus, más céntrico. Si no llegas en coche, puede ser mejor opción.
Dónde comer cerca de Reus: restaurante Mas La Boella
Nuestra intención era comer en el restaurante Ferran Cerro, recomendado en la Guía Michelin, pero justo estuvimos en Reus un domingo y un lunes, los dos días de cierre. También nos recomendaron La Giberga, con su Solete Repsol. Aunque nos decantamos por el Museu del Vermut, también con Solete.
Por la noche salimos de la ciudad para cenar en otro restaurante recomendado en la guía Michelin: Mas La Boella. Es un hotel restaurante ubicado en una finca preciosa entre Tarragona y Reus y su comida de proximidad es una delicia. Disfrutamos como niños de sus huevos rotos con patatas y jamón ibérico, de su cochinillo a baja temperatura, de su bacalao confitado, de su tarta de queso, de su mousse de crema catalana… Un lujo de comida y, si vas a mediodía, hay menú por 35 euros.
Modernismo, cultura del vermú y buena gastronomía, ¿qué más se puede pedir?
¿Quieres visitar Reus? Aquí puedes hacerlo:
- Busca tu vuelo más barato a Barcelona aquí.
- Escoge el hotel que más te guste al mejor precio en Reus aquí.
- Alquila el coche en Tarragona al mejor precio aquí.
- La mejor guía de Cataluña aquí
- Contrata tu tour guiado en Cataluña aquí.
- Contrata tu seguro de viaje con un 5% de descuento aquí.
No hay comentarios