No todas las ciudades romanas que se conservan fueron cubiertas por la lava de un volcán. Muy cerca de Roma se encuentra una en la que llegaron a vivir 50.000 habitantes allá por el siglo II de nuestra era. Hablamos de Ostia Antica, el puerto de la Ciudad Eterna, el lugar al que llegaban las mercancías de todo el Imperio antes de ser trasladadas hasta la capital remontando el río Tiber. Hoy, bastante más lejos del agua que hace dos mil años, es un muestrario de la arquitectura, de los ritos y de la cultura romana a lo largo de casi mil años.
Prepárate para descubrir mosaicos de un detalle que no te esperas, grandes edificios como el teatro o las termas, todo tipo de cultos –templos de todos los “sabores”, incluidos cristianos– y hasta un local de comida rápida. Ostia Antica nos muestra cómo de parecidos seguimos siendo a sus habitantes, casi dos milenios y medio después.
¿Te animas a pisar las calles de Ostia Antica? Ponte gorra y calzado cómodo, que aquí no hay aceras ni asfalto. Date un poco de bronceador y coge tu botella de agua. Nos vamos de expedición.
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Date una vuelta por nuestros consejos para viajar a Roma (por una italiana) para saber con qué te vas a encontrar en la Ciudad Eterna. Y, si buscas organizar tu viaje, echa un vistazo a nuestro Que ver en Roma en 3 días y a nuestros 2 días en Roma. En ninguno está visitar Ostia Antica, pero es que el tiempo es tan corto y hay tanto que ver.
Dónde está y cómo llegar a Ostia Antica desde Roma
Ostia Antica era, como hemos dicho, el puerto de Roma en la época de la República y del Imperio. Aunque ahora no lo parezca, hace dos mil quinientos años estaba junto al río Tíber y al mar Tirreno. Era allí donde atracaban los grandes barcos con mercancías de todas las colonias. Donde se almacenaban. Y donde se embarcaban en naves más pequeñas que, remontando el río, llegaban a la capital. Hoy en día está a unos 5 kilómetros del mar, por “culpa” de las toneladas de sedimentos arrastradas por el río. Y el río tampoco sigue allí, una inundación en 1557 cambió el curso del Tíber.
La ciudad se encuentra a unos 25 kilómetros al suroeste de Roma. Es fácil de encontrar en un mapa: solo hay que seguir el curso del Tíber y parar antes de llegar a la costa.
La mejor forma de llegar a Ostia Antica desde Roma es en transporte público. La línea de tren a Ostia Lido tiene una parada llamada Ostia Antica a unos cinco minutos a pie del parque arqueológico. La duración del trayecto es de unos 25 minutos, salen cada cuarto de hora y el precio es de 1,50 € por persona y trayecto. De hecho, como te contamos en nuestros consejos para moverse por Roma en transporte público, el billete es válido para todos los transportes durante 100 minutos. Puedes subir al tren en la estación Porta San Paolo –junto a la estación de metro Pirámide–.
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No te confundas, Ostia Antica no es lo mismo que Ostia Lido. La primera era el antiguo puerto de la ciudad, allá por el principio de nuestra era. Mientras que la segunda es la playa de Roma, hoy en día. Ten cuidado, no acabes entre sombrillas y bronceador en lugar que entre ruinas e historia.
Información práctica: entradas, horarios y precios
El parque arqueológico de Ostia Antica abre todos los días del año excepto los lunes, el 1 de enero, el 1 de mayo y el 25 de diciembre. Los horarios varían según la época, así que te recomendamos que los confirmes en la web oficial. La hora de apertura es siempre las 8:30, pero el cierre varía de las 16:30 a las 19 h. Eso sí, la taquilla cierra una hora antes en todos los casos, tenlo en cuenta. El precio de la entrada completa es de 12 €, aunque hay días de entrada gratuita como el 25 de abril –día de la Liberación de Italia– y es uno de los sitios arqueológicos de Roma gratis el primer domingo de mes.
Tours por las ruinas de Ostia Antica
Si no quieres preocuparte por el cómo llegar a Ostia Antica, por comprar la entrada –normalmente con cola– y por leer los carteles, siempre puedes contratar una excursión guiada a Ostia Antica desde Roma. Seguirás aprovechando el tren, es más rápido llegar en tren que en coche, y tendrás un guía en castellano en todo el recorrido. Aquí puedes ver los precios y las características.
Un poco de historia, ¿por qué?, ¿cuándo?, ¿quién?…
Los restos más antiguos de Ostia Antica datan del siglo IV a.C.. Se trata de una fortaleza construida con bloques de toba con fines militares: para controlar la desembocadura del Tíber, el acceso a Roma y toda la costa del Lacio.
Pero, ¿no era un puerto comercial? Sí. Cuando Roma conquistó el Mediterráneo –el Mare Nostrum, por suyo en realidad–, dejó de necesitar un fuerte para controlar el río y la costa. En el siglo II a.C., Ostia Antica va pasando a ser puerto comercial, llegando a ser el principal emporio de la capital. La fortaleza se quedaba pequeña y se levantaron grandes instalaciones al norte –donde ahora está el aeropuerto de Fiumicino–. Los dos primeros siglos de nuestra era fueron los más favorables a la ciudad, llegando a contar con 50.000 habitantes en el siglo II.
La decadencia del Imperio Romano a finales del siglo III y el nuevo puerto de Trajano redujeron su importancia. Los ataques y saqueos de los sarracenos no ayudaron y para el siglo IX la ciudad estaba abandonada. Los edificios de Ostia Antica se utilizaron como cantera en la Edad Media. La puntilla final fue la inundación del Tíber en 1557 que cambió el curso del río, aislándola.
A principios del siglo XIX comenzaron las primeras excavaciones en Ostia Antica, una ciudad que estaba abandonada y olvidada hasta ese momento.
Qué ver: qué te vas a encontrar
Hablamos de un millón y medio de metros cuadrados… así que te vas a encontrar muchas cosas. Lo primero, con que no vas a saber a dónde mirar y con la sensación de que no vas a tener tiempo de verlo todo. Que no cunda el pánico, nosotros, que somos de no dejar ni un número en el mapa sin visitar, la recorrimos por completo en unas cuatro horas. Así que, seleccionando, puedes ver lo principal en un par de horas.
La necrópolis de la via Ostiense
La visita al parque arqueológico comienza con la necrópolis de la via Ostiense –la carretera que unía la ciudad con Roma–. Un muestrario de arquitectura funeraria que va del siglo II a.C. al III-IV d.C. Recintos donde los muertos eran incinerados, nichos para urnas cinerarias, tumbas con sarcófagos, arcosoli –como los de las catacumbas de Roma–…
En la paralela via dei Sepolcri encontrarás los Colombari Gemelli –dos tumbas casi reflejadas del siglo I d.C.–, un gran sarcófago de estilo oriental del siglo III d.C., la Tumba de los Archetti –también del siglo I d.C.– y un mausoleo cuadrado –en la esquina de la via di Ermogene y via Ostiense–. Seis siglos de tumbas dan para ocupar mucho espacio.
Termas de las provincias
Con 50.000 habitantes, puedes imaginar que había unas cuantas termas en Ostia Antica. Las primeras que verás en tu visita serán las Terme delle Province –las termas de las provincias–. Busca el mosaico de la época del emperador Claudio –54-68 d.C.–. Un panel central con delfines rodeado por representaciones de las provincias romanas de la época –España, Sicilia, Egipto y África– y los cuatro vientos.
Es lo único que se conserva de los baños más antiguos de Ostia Antica. A finales del siglo I d.C., Domiciano puso en marcha un proyecto que supuso la elevación del suelo de la ciudad en un metro y la destrucción de varias edificaciones de las termas.
Termas de Neptuno
Las Terme di Nettuno –termas de Neptuno– son las más impresionantes de Ostia Antica. Si el mosaico de los delfines te dejó con la boca abierta, espera a ver este. Para que te hagas una idea, hay que subir a un mirador: su tamaño merece una vista de altura. Una cuadriga de hipocampos conducida por el mismísimo dios del mar rodeado por delfines, tritones y otros animales marinos. Una maravilla de principios del siglo II d.C. que ha llegado a nuestros días.
Aquí también se han conservado los edificios circundantes del gimnasio –palestra– con sus arcadas y algunos mosaicos. Eso sí, los mosaicos del gimnasio no están en tan buenas condiciones y están protegidos.
Teatro
No podía faltar un teatro en Ostia Antica, en realidad, un anfiteatro. Fue Agripa –el del Panteón– quien lo mandó construir a finales del siglo I a.C.. Posteriormente fue ampliado hasta llegar a dar cabida a 4.000 espectadores. ¿Qué mejor sitio para descansar un poco de tanta historia que un anfiteatro romano?
Piazzale delle Corporazioni
El Piazzale delle Corporazioni, la plaza de los gremios, es la confirmación del carácter mercantil que alcanzó Ostia Antica. Detrás del anfiteatro se abre una explanada en la que los distintos gremios de la ciudad tenían su espacio. ¿Cómo se sabe? Porque delante de cada cubículo hay un mosaico que explica a qué se dedicaban ahí. Mosaicos con imágenes y con textos en latín.
No dejes de pasar por delante de ninguno y trata de descubrir a qué se dedicaban a través de los dibujos antes de leer los textos explicativos.
Termopolio della Via Diana
El Termopolio della Via Diana era un local de comida rápida del Imperio Romano. En pleno centro de la ciudad, era el lugar en el que locales y mercaderes podían comprar comida caliente y bebida en un mostrador que poco tiene que envidiar a la barra de cualquier bar moderno. Incluso tenía una zona de terraza, en el patio, con una fuente y un banco. Todavía se conservan los frescos que decoraban el local con representaciones de comida y bebida. Sí, todo era muy gráfico en Ostia Antica.
Más lugares que ver en Ostia Antica
¿Está todo visto ya? Obviamente no. Ya hemos dicho que son un millón y medio de metros cuadrados. Faltaría por caminar por las calles principales de cualquier ciudad romana: el Cardus Maximus y el Decumanus Maximus, que marcaban los cuatro puntos cardinales y que se cruzaban en el centro exacto del plano.
También hay casas privadas, como la domus de Amore e Psiche, llamada así por una estatua de Amor y Psique encontrada en su interior; la domus delle Muse, con frescos de musas que decoran sus paredes; o la casa de Diana, también decorada con frescos. Además de la zona del mercado menor, con los locales en los que se vendían las mercancías.
Rincón Salta Conmigo
En los baños de Mitra encontramos un mitreo. Dicho así no parece nada sorprendente. Pero, si no sabes lo que es un mitreo, el choque de oscuridad, luz y la escultura de Mitra dando muerte al toro –Mitra Tauróctonos–, te dejarán un momento congelado sin saber si has saltado de dimensión.
Por no hablar de la zona de almacén de restos encontrados en las excavaciones y del museo del sitio.
Mapa de Ostia Antica con los lugares que tienes que visitar
Con el tamaño que tiene el parque arqueológico de Ostia Antica, sabemos que te va a hacer falta un mapa para orientarte y para ir a los lugares que te recomendamos. Si tienes tiempo de sobra, ya sabes, no dejes ni uno.
Tómate tu tiempo, Ostia Antica lleva ahí más de veinticinco siglos, tendrás que pasar unas horas en ella si quieres ver algo.
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