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Visitar las catacumbas de París: el “imperio de la muerte”

Te contamos nuestra experiencia sobre una de las “atracciones” más visitadas y, sin duda, la más macabra de la capital francesa. Todo sobre la visita a las catacumbas de París: desde un poco de historia hasta las sensaciones que tuvimos al recorrerlas, pasando por leyendas y misterios o información práctica (entradas, precios, reservas online, etc.). Sin duda, una de las cosas que ver en París en 3 días.

“Arrête, c’est ici l’empire de la mort”. Para, he aquí el imperio de la muerte. ¿Qué harías tú si leyeras esto encima de una puerta a 20 metros bajo tierra? La lógica sugeriría que nadie se atreviera a atravesar ese umbral. Pero la lógica y la mente humana no siempre van de la mano. Tras esa puerta se halla el osario municipal de las catacumbas de París, con los restos de aproximadamente –porque, ¿quién puede calcularlo con exactitud?– 6 millones de parisinos.

francia paris catacumbas calaveras

Un “imperio de la muerte” habitado por 6 millones de súbditos que pueblan un verdadero laberinto en el corazón de la París subterránea. Un “imperio de la muerte” que recibe miles y miles de visitas de hombres y mujeres que no son sus súbditos, que pertenecen a otros tiempos y que siguen conservando su carne, pero que sienten una atracción inexplicable hacia lo macabro. Dos de esos visitantes fuimos nosotros y no, no sabemos explicar por qué nos atrapó tanto…

Breve historia de las catacumbas de París

A finales del siglo XVIII, algunos de los cementerios de París fueron cerrando por motivos de insalubridad pública. Los cuerpos que allí descansaban se fueron transfiriendo a las galerías que había bajo tierra en la capital. Las antiguas canteras cuyas piedras habían sido utilizadas para construir los edificios de París. El primero de esos cementerios en cerrar fue el de los Inocentes, en el actual distrito de Les Halles, en 1785. Las canteras subterráneas recibieron a sus primeros inquilinos el 7 de abril de 1786: las catacumbas de París habían abierto.

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Hasta mediados del siglo XIX las catacumbas de París siguieron recibiendo más cuerpos para llegar a esa increíble cantidad de 6 millones de “almas”. Fueron más de 150 los cementerios de monasterios, conventos y otros lugares dedicados al culto los que enriquecieron el osario subterráneo hasta 1859.

Sensaciones al visitar las catacumbas de París

En la misma web oficial de las catacumbas de París, se habla de una “maraña de galerías oscuras y pasillos estrechos”, puede que para darle ese punto de película de terror que atrae a los visitantes. Pero, para ser sincera, debo decir que las galerías son bastante grandes e incluso suficientemente iluminadas. Me atrevería a decir que un claustrofóbico podría pasear por ellas sin problemas. Lo que más impacta, y puede que le saque algún que otro escalofrío a los más sensibles, es la “puesta en escena”: esa decoración que en la web definen “romántico-macabra”.

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Un recorrido teatral donde la protagonista es la muerte. ¿Imaginas un corazón hecho con calaveras? ¿O un pilar en forma de barril que está formado por cráneos y tibias –lo llaman “tibia rotunda” y está en la cripta de la Pasión–? En las catacumbas de París podrás verlos, entre muchas otras “obras” hechas a base de huesos humanos. En el momento las admiras, te fascinan, te sorprenden… pero al rato, si piensas que son restos de personas como tú, ¿no deberían conmoverte o hasta horrorizarte? Puede que sí pero, al fin y al cabo, nuestro restos no son nada tras nuestra muerte y así pasan a ser arte, o sea inmortales, ¿no?

francia paris catacumbas huesos

El paseo, que discurre por calles y avenidas con sus nombres, como si de una “ciudad paralela” se tratara, –en el pasado la llamaban “copia de París”– es acompañado, además, de placas con citas de poemas y otros textos religiosos y no religiosos, que incitan un poco más a meditar sobre la muerte. “Es por la maldad del diablo que la muerte entró en el mundo” y “La limosna te liberará de la muerte” son dos de ellas. O «Al son de las trompetas los muertos resucitarán«, lo que hace que estar ahí en ese momento no sea buena idea…

Dicho así no parece divertido, lo sé…

El recorrido de la visita

En la primera parte del recorrido hay paneles informativos en los que se explica la historia de las catacumbas. Se empieza por su evolución geológica descubriendo curiosidades como que hace 45 millones de años en el lugar donde hoy se encuentra París había un mar tropical. Allí se acumularon los sedimentos transformados después en piedra caliza. Piedras que, a partir del siglo I d.C., se empezaron a utilizar para construir Lutetia, la París romana –por eso al periodo en el que se formaron lo llaman “luteniano”–. Es la que se conocería como “pierre de Paris”, piedra de París, y más adelante se utilizaría también para construir la catedral de Notre-Dame, el edificio del Louvre y muchos otros palacios parisinos.

francia paris catacumbas galeria cantera

También hay paneles que hablan de la historia del osario, del por qué se hizo necesario cerrar los antiguos cementerios de París, de la rehabilitación que se hizo a las canteras, etc. Durante el recorrido hay otros que explican curiosidades sobre la construcción y acondicionamiento del lugar como los sistemas de ventilación, de soporte o las rayas en el techo para orientarse.

Después de la primera parte del recorrido por las antiguas canteras, se llega a esa puerta precedida por dos pilares neobabilónicos. Y se entra al imperio de la muerte.

francia paris catacumbas entrada interior

En total el recorrido es de unos 2 km, aunque parece más largo, no porque no sea “entretenido” sino por lo intenso que es emocionalmente recorrerlo. El osario tiene unos 800 m y nada menos que 11.000 m2 de superficie. Resérvate, por lo menos, una hora para la visita.

Información práctica: entradas, precios, venta online, cómo llegar, mapa…

Aquí tienes algo de información práctica para la visita de las catacumbas de París:

  • Dirección: la entrada es en esta dirección 1, avenue du Colonel Henri Rol-Tanguy (place Denfert-Rochereau), cuidado porque la salida no es por el mismo sitio, se sale por la rue Rémy Dumoncel;
  • Cómo llegar: hay una estación de metro y RER (línea B) justo enfrente de la entrada de las catacumbas, la de Denfert-Rochereau, también llegan los autobuses 38 y 68 (de todas formas, el Google Maps funciona muy bien en París para saber cómo llegar en transporte público desde cualquier punto de la ciudad);

francia paris catacumbas calaveras cruz

  • Accesibilidad y otra información: hay que bajar 130 escalones y subir 83 durante la visita y el sitio no es accesible para personas con movilidad reducida. No hay baños –hay uno de pago en la tienda de recuerdos frente a la salida– y no se pueden llevar mochilas o bolsos grandes, ojo: tampoco hay guardarropa;
  • La temperatura es de unos 14ºC todo el año y el aire es húmedo, así que hay que ir preparado, sobre todo en verano;
  • Horario: de martes a domingo de 10 a 20:30 h, cierre de las taquillas a las 19:30h;
  • Precios: tarifa entera 17 €, reducida 14 € (condiciones en la web oficial), hay audioguías por 5 € también en español (nosotros no la cogimos así que no podemos decir qué tal es, aunque agradecimos dejar más libertad para las sensaciones de la visita)

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  • El folleto con el mapa del recorrido de las catacumbas de París no está incluido en la entrada normal;
  • Tickets online: sólo pueden entrar 200 personas a la vez en las catacumbas, uno de los museos más visitados de París así que, a menudo, se forman colas. Para evitarlas, se puede reservar online en la página oficial, aunque es más caro. Si no reservas, lo mejor es que llegues una media hora antes de la apertura por lo menos.

francia paris catacumbas entrada cola

Curiosidades: leyendas sobre las catacumbas, misterios, películas, famosos, entradas ilegales…

Hay muchas curiosidades sobre las catacumbas de París. Algunas, son cifras, por ejemplo, ¿sabías que en total hay 300 kilómetros de catacumbas excavados, aunque actualmente puedan visitarse sólo una pequeña parte?

Otras son sobre la historia de las visitas a las catacumbas. Ya desde finales del siglo XVIII eran visitadas por “curiosos”. La visitaron incluso el emperador de Austria Francisco I en 1814 y Napoléon III con su hijo en 1860. Pero lo más curioso es la fiesta macabra que se celebró la noche del 2 de abril de 1897 y en la que participaron “sabios, artistas y burgueses”, según se comenta también en la web de las catacumbas.

francia paris catacumbas tibia rotunda

También los hay famosos enterrados en las catacumbas, por ejemplo Charles Perrault, el creador de cuentos infantiles como Pulgarcito, Cenicienta o La bella durmiente –pero seguro que Disney no ambientaría aquí ninguna de sus películas–, o Robespierre, junto a los cuerpos de otros guillotinados durante la Revolución Francesa.

Luego, por supuesto, están las historias de muerte… Durante la visita se pasa por una galería con esculturas hechas directamente en la piedra de la antigua cantera y que representan el puerto de Mahón, en Menorca –cuando fuimos nosotros debía de estar cerrada porque no la vimos–. Las realizó un guardián de las canteras, veterano del ejército de Luís XV, en recuerdo del lugar donde estuvo preso. El pobre hombre murió justamente en las catacumbas durante un derrumbamiento –si sabes francés, puedes ver el vídeo en la página inicial de la web de las catacumbas, donde lo cuentan–. No es el único que murió ahí, otro es Philibert Aspairt, portero del hospital militar de Val-de-Grâce durante la revolución francesa, que entró a las catacumbas a través de unas escaleras que había en el patio del hospital en 1793 y cuyo cuerpo fue encontrado sólo 11 años después, en 1804, sin que se conociera nunca la causa de la muerte. Se dice que había bajado ahí en búsqueda de la bodega del hospital…

francia paris catacumbas huesos cruz

Por supuesto, en un sitio así no pueden faltar historias de misterios, de fantasmas y leyendas. En Scyfy enseñaron este video sobre la historia de una cámara encontrada en los años ‘90 en una parte no abierta al público de las catacumbas –advierto que la voz de la chica de “ultratumba” de los titulares es muy molesta–. En ella había grabada una persona que enseña los túneles y de repente, empieza a correr más y más fuerte, aterrada, hasta que se le cae la cámara al suelo, lo último que se ve son sus pies corriendo… Nada más se supo del dueño de la cámara.

Hay incluso una película de terror con toques de aventura arqueológica, bastante mala, en la que las catacumbas son protagonistas: Así en la tierra como en el infiernoAs Above, So Below es el título original en inglés y Les Catacombs en francés–.

francia paris catacumbas calavera

Asesinatos, rituales satánicos, historias de fantasmas, de visitantes que se pierden y nunca vuelven a salir o que notan presencias y hasta intentos de estrangulamiento por seres desconocidos… hay todo tipo de leyendas que rodean las catacumbas de París y que circulan por Internet. ¡Las catacumbas son “el paraíso” de los investigadores paranormales! Son muchos los “cataphiles”, los amantes de las catacumbas, que entran por sus accesos prohibidos de forma ilegal en busca de aventura. O los jóvenes que lo hacen para “divertirse” en una noche de fiesta, como los que, en 2011, se perdieron y estuvieron dos días vagando por los túneles subterráneos de las catacumbas no abiertos al público –se puede leer la noticia en Le Parisien–.

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Incluso sin misterio ni leyendas las catacumbas de París son una visita obligada y un lugar alucinante, pero una pizca de sal nunca viene mal…

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