Sueño cumplido. Hemos vivido el Día de Muertos en México. Un sueño que nos había arrebatado la pandemia, un motivo más por el que nos ha hecho especial ilusión cumplirlo. Y solo podemos decir que es algo que hay que hacer por lo menos una vez en la vida. O más de una, porque en cada estado de México se vive de forma diferente. Las celebraciones del Día de Muertos que más fama tienen son las de los estados del centro y centro-norte del país, como Michoacán –allí está ambientada la película de Pixar Coco–, Puebla, Estado de México, Ciudad de México… y solo alguno del sur, como Oaxaca. Pero nosotros nos fuimos a descubrir cómo se celebra el Día de Muertos en Yucatán y en particular en su capital, Mérida.
Aquí las tradiciones maya son parte del ritual de la celebración. Una celebración que, de hecho, tiene nombre maya: Janal Pixán. ¿Qué significa Janal Pixán? ¿Cómo se celebra?
Vente al Festival de las Ánimas de Mérida con nosotros y te lo contamos todo. Por ahora solo te decimos que acompañar a las ánimas iluminadas por las velas en su camino desde el cementerio ha sido una experiencia viajera que se quedará grabada en nuestra memoria para siempre.
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Antes de lanzarte a vivir el Día de Muertos en Mérida, no dejes de leer nuestra guía práctica para viajar a la Península de Yucatán y a la Riviera Maya con todos nuestros consejos. Echa un vistazo a nuestro artículo Qué ver en Mérida para completar tu viaje. Y, si quieres más tradiciones, date una vuelta por nuestro artículo El Día de Muertos en Pomuch y la limpieza de huesos.
El Día de Muertos en México
El Día de Muertos es una celebración de todo México que une la visión de la muerte de las culturas prehispánicas de Mesoamérica y algún elemento cristiano. Por ejemplo, sin ir más lejos, las fechas: alrededor del día de los difuntos católico, el 2 de noviembre –aunque ya en su día se celebraba por esas fechas, próximas a la cosecha del maíz–.
En la visión indígena, el Día de Muertos representa el retorno temporal de las ánimas de los muertos. Regresan al mundo de los vivos para reencontrarse con sus familiares y seres queridos que, para darles la bienvenida, les preparan altares adornados con, entre otras cosas, sus comidas favoritas.
En cada estado y cada pueblo el Día de Muertos se celebra de forma un poco diferente, en la página del gobierno de México tienes un resumen de su origen, de los rituales y del por qué en 2008 fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.
Lo que no varía es que las familias se reúnen para saludar a sus seres queridos que vuelven del más allá. Para los que venimos de países de culturas judeocristianas, lo más sorprendente es que en estos días la muerte no se asocia con tristeza y luto. Son días de fiestas, de celebrar el reencuentro con los que “se han adelantado” en el viaje eterno y de recordar los buenos momentos vividos juntos. Esto es lo que más nos costó entender y, al mismo tiempo, lo que más nos hizo disfrutar de la fiesta.
Celebración y tradiciones del Día de Muertos en Yucatán: el Janal Pixán
En Yucatán el Día de Muertos es el Hanal Pixán o Janal Pixán, que literalmente significa “comida de las ánimas”. La comida que ofrecen los familiares y los amigos para mantener el vínculo con las almas de sus difuntos, inmortales para los mayas.
El día 31 de octubre es el hanal palal, dedicado a los pixanitos, los niños difuntos. El día 1 de noviembre es el hanal nucuch uinicoob, dedicado a los muertos “grandes”, los adultos. Y el día 2 de noviembre es el hanal pixanoob o misa pixán, el día en el que se suele celebrar una misa dedicada a las ánimas de los difuntos, normalmente en los cementerios.
Como en el resto del país, se preparan altares para las ánimas, pero con variaciones locales. Siguen estando las fotos de los difuntos y el incienso que les guía con su olor. Pero, si en el centro del país los colores predominantes en estas fechas son el morado y el naranja, aquí lo es el blanco, el color del mantel. También hay flores, que simbolizan la alegría con la que se recibe a los difuntos, pero aquí, además de las típicas flores naranjas de Cempasúchil del centro del país, hay variedades locales. Las velas, luz para que las ánimas encuentren su camino, son negras para los adultos y de colores para los niños. También hay jícaras –recipientes hechos con el fruto del jícaro– con chocolate, atole de maíz o sal y agua, elementos purificadores.
Tampoco puede faltar la cruz verde, representación del árbol sagrado de los mayas, la ceiba, luego “cristianizada”.
El mucbipollo
Lo más diferente es la comida: en Yucatán no son habituales ni el pan de muertos ni las calaveritas de azúcar –aunque se empiecen a ver–. Lo que sí lo son, además del atole, son los cítricos, otras frutas y plantas, panes dulces, tamales y, sobre todo, los pibes o mucbipollos.
¿Y qué es el pib o mucbipollo? Pues es un gran tamal relleno de carne, de pollo o cerdo, salsa de tomate y chile. En maya significa “enterrado” y es que se envuelve en hojas de plátano y se cocina en agujeros excavados en la tierra. Nosotros tuvimos la suerte de ver cómo lo preparaba una familia en Pomuch, que está en Campeche, pero en toda la Península de Yucatán existe la misma tradición. También puedes verlo en algún restaurante yucateco, como Pueblo Pibil.
Más celebraciones
En general, es una fiesta más casera que en el resto del país: no hay tradición de catrinas ni de grandes celebraciones, ni decoración en los panteones de los cementerios. Pero suele haber dos eventos: el paseo de ánimas, un desfile que simboliza la salida de las ánimas al mundo de los vivos desde los cementerios hasta las casas de sus seres queridos, y la vaquería de ánimas.
¿Sabías que…?
Las vaquerías son las fiestas tradicionales de Yucatán. Se llaman así porque, en la época colonial, se celebraban en ocasión del marcado del ganado en las haciendas. El centro de la fiesta es la plaza del pueblo, donde se toca y se baila el baile local por excelencia: la jarana yucateca.
Tanto en el paseo de ánimas como en las vaquerías de ánimas las ánimas son representadas con maquillaje, el maquillaje de “calavera” que ya conocerás. Esta no es, en realidad, una tradición yucateca: es otro elemento “importado” en los últimos años de otros estados de México. Lo que sí es tradicional es que las ánimas vistan el traje yucateco. Las mujeres, el hipil yucateco blanco con flores bordadas o el terno de gala –en tres piezas–, con zapatos blancos y flores en la cabeza. Y los hombres, guayabera de seda o lino y pantalón de dril, ambos blancos, sombrero de paja, en los bolsillos un paliacate –la pañoleta típica– rojo y alpargatas yucatecas o sandalias de tacón.
El Festival de las Ánimas de Mérida
Aunque las celebraciones en los pueblos puedan ser muy sugestivas –nosotros las vivimos en Pomuch (Campeche) y Ticul (Yucatán)–, como capital de Yucatán y mayor ciudad de la península, en Mérida es donde el Día de Muertos se celebra más “a lo grande”. El paseo de ánimas es el más “masivo”, en la vaquería de ánimas participan grupos profesionales de baile, hay muchos más eventos y muchísimo ambiente. ¡No te lo puedes perder!
El Paseo de las Ánimas: fecha de 2023
Sin duda, el evento más importante y más emocionante del Festival de las Ánimas de Mérida es el Paseo de las Ánimas. Un paseo que empieza en el Cementerio General, guiado por la luz de las velas. Allí nos quedamos un buen rato admirando el maquillaje y los trajes tradicionales de niños, adultos y mayores y alucinando como chiquillos. Se suele realizar entre el viernes anterior al 1 de noviembre y el 31 de octubre, la fecha se confirma a principios de octubre. En 2023 será el 27 de octubre (el Hanal Pixán es del 24 de octubre al 2 de noviembre 2023).
Antes de empezar el camino, hay una recreación de Pot Ta Pok, el juego de la pelota maya. Justo después inicia la procesión que, a paso lento, recorre 13 manzanas –”cuadras” aquí–, pasando por la ermita de Santa Isabel y llegando hasta el Parque de San Juan. En 2022, cuando fuimos nosotros, participaron más de 500 ánimas y, a lo largo del recorrido, se colocaron 232 altares, algunos de empresas y organizaciones locales y otros de las familias de esos barrios. ¡Hasta había uno de un perrito! También hay un montón de puestos de comida a lo largo de todo el recorrido.
Lo único que le quita un poco de encanto es que, como en primera fila van las autoridades –el alcalde in primis–, el paseo va precedido de una marea de periodistas haciendo fotos y vídeos. Una “barrera humana” armada de cámaras y móviles. Pero bueno, cuando pasan ya se puede disfrutar del desfile.
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El paseo empieza a las 8 de la tarde. Te aconsejamos ir un par de horas antes a las gradas que se colocan justo antes de la entrada del cementerio. Las vistas desde allí son las mejores.
Maquillarte de calavera
También puedes maquillarte de ánima para vivir la fiesta más todavía. ¡Nosotros no lo dudamos! Tienes que ir a la plaza de la ermita de Santa Isabel. Allí se colocan todas las maquilladoras. En menos de 10 minutos y por solo 40 pesos –unos dos euros–, te convertirás en ánima por un día. Eso sí: ¡importantísimo llevar toallitas desmaquillantes! Anda que no nos costó quitarnos el maquillaje a nosotros con agua y jabón… Puedes llegar sobre las 5/5:30 para luego recorrer el camino hasta el cementerio.
La Vaquería de Ánimas
Todos los lunes en el Parque, la plaza principal, de Mérida hay vaquería. Durante la celebración del Janal Pixán la vaquería se convierte en Vaquería de Ánimas, con los bailarines maquillados como tal. En los bajos del Palacio Municipal, los integrantes de los Ballets Folclóricos Titular y Juvenil del ayuntamiento, acompañados de una representación del Ballet del Adulto Mayor y del Infantil, nos entretuvieron un buen rato al ritmo de la jarana yucateca. Hubo bailes con mezcla de jota aragonesa, la danza de la cinta, un baile de cuadrilla… ¡y hasta uno dedicado a la cochinita pibil –un plato típico yucateco–!
El Pok Ta Pok de muerte
Otro evento clásico de todas las semanas, en este caso los sábados, en el Parque de Mérida es la representación del Pok Ta Pok, el juego de la pelota maya, en el que participan 22 personas, entre músicos y jugadores. Este evento también se incorpora a las fiestas, convirtiéndose en Pok Ta Pok de muerte, con los jugadores vestidos de ánimas.
El nuevo desfile de Catrinas
Hemos dicho que las Catrinas no son típicas de Yucatán, pero también han llegado al Día de Muertos de Mérida. La gran novedad del Festival de Ánimas de 2022 fue el Desfile de Catrinas, saliendo de las puertas de la catedral y llegando hasta el Remate del Paseo de Montejo. Un homenaje a la celebración del Día de Muertos en el centro de México, con bailarines caracterizados como ánimas y vestidos con los trajes de diferentes estados del país. Había Catrinas, Catrines –sí, ¡hay masculino de Catrina, Catrín!– ¡y hasta una drag queen con vestido con altar de muertos incluido!
Más eventos del Festival de Ánimas de Mérida
En el Festival de Ánimas de Mérida hay muchos más eventos: se coloca un altar “monumental” –de 16 metros de largo y 5 metros de alto– en el Parque, hay una feria de mucbipollo, musicales gratis –el de Coco cuando fuimos nosotros– y hasta ¡una visita a una hacienda fantasma! Sí, también fuimos a la hacienda abandonada de Misnébalam la noche del 31 a escuchar sus historias de fantasmas… No tuvimos que llamar a los cazafantasmas, pero fue interesante. Como también la muestra de altares tradicionales frente a la cercana hacienda abandonada de Xcunyá.
En la página oficial del ayuntamiento de Mérida tienes todo el programa en detalle, aquí el de 2022 para que te hagas una idea.
Un sueño cumplido y sí, había que vivirlo por lo menos una vez.
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