Cuando siete reyes y diez reinas viven en un mismo castillo a lo largo de más de cuatro siglos, está claro que algo tiene que tener ese castillo. Más aún, si hablamos de uno situado en el valle del Loira donde tiene que competir con más de dos docenas de impresionantes construcciones. Ésta es la carta de presentación del castillo real de Blois, el Château Royal de Blois.
El castillo real de Blois
Si se comienza la ruta por el valle del Loira con el castillo de Chambord se puede pensar que, desde ese momento, nada te va a sorprender. El castillo real de Blois nos sacó de nuestro error nada más llegar a su entrada con la estatua ecuestre de Luis XII y nos dejó con la boca abierta al atravesarla y contemplar, en su patio, que no estábamos ante un castillo, sino ante cuatro distintos.
El patio del castillo real de Blois recuerda a una plaza cualquiera de una gran ciudad en la que cada lateral está ocupado por un edificio diferente, en este caso conectados. Nos encontramos frente a un muestrario de la evolución de los estilos arquitectónicos utilizados en la construcción de castillos a lo largo de cuatro siglos en Francia. Desde el origen, del que queda poco, de la construcción en el siglo X hasta la última ala del XVII, sin olvidar las restauraciones y reformas del XIX, del XX y del XXI.
Cualquiera pensaría que los propios reyes decidieron ir construyendo sin destruir lo anterior –bueno, algo fueron derribando para hacer sitio, pero siempre dejando una parte– con la idea de crear un muestrario de cómo iban cambiando los estilos. Como si quisieran mirar cada mañana por su ventana y decir: el de mi antepasado era bonito, pero el mío es mucho mejor.
Desde los condes de Blois hasta un destacamento militar
En el siglo X, los condes de Blois decidieron construir un castillo en la ciudad. Seguro que no imaginaban que se convertiría en castillo real –y que lo sería durante más de 400 años– y acabaría siendo un cuartel militar justo antes de la Revolución Francesa. Fue durante la revolución cuando los símbolos de dos de sus más ilustres ocupantes Luis XII y Francisco I fueron casi arrasados. Sólo sobrevivieron un puercoespín, símbolo de Luis XII, y una salamandra, Francisco I.
En 1843 la ciudad de Blois decidió restaurar el ala de Francisco I y, a partir de ahí, se fue recuperando el resto del castillo –incluso acabando, porque la última ala no había sido completada–.
Reyes, reinas, bodas, funerales, asesinatos, visitantes ilustres –Medici, Borgia, Maquiavelo…–, revoluciones… la historia del castillo real de Blois es la historia de Francia.
El gótico, condes de Bois, la Edad Media
De la construcción de la Edad Media queda poco hoy en día, aunque lo que resiste llama la atención. Nada más y nada menos que la mayor sala civil gótica de Francia construida a principios del siglo XIII. Hoy en día es una zona llena de tecnología –bonito contraste temporal– desde la que recorrer el castillo en sus pantallas con proyecciones en 3D. Incluso sin la tecnología, sus 540 m2 y las más de 6.000 flores de lis que decoran su techo hacen de la sala un lugar impresionante.
El gótico flamígero, Luis XII
Luis XII nació en Blois y, nada más convertirse en rey de Francia, mandó construir un ala en ladrillo y piedra junto al antiguo castillo de los condes de Blois. Allí fijó su residencia real –todavía hoy se ve su estatua ecuestre en la entrada del castillo–. Y ¿por qué un futuro rey de Francia nació en Blois? Porque la Guerra de los Cien años provocó que los reyes de Francia abandonaran París, trasladando su capital a Tours.
Hoy en día, este ala del castillo alberga un museo de bellas artes.
El renacimiento, Francisco I
El gran “rey constructor” comenzó su carrera en el castillo de Blois, fue su primera obra. El estilo es completamente diferente al de Luis XII y eso que sólo tiene 15 años de diferencia, pero ya se observan las formas y elementos que convertirían después a Chambord en una pieza única.
Nosotros ya habíamos pasado por su gran obra, por lo que la escalera exterior no pudo menos que recordarnos a las de aquél. Hoy en día la vemos ladeada, pero esto se debe a que el siguiente “constructor” derribó una parte de la fachada para construir su ala.
Esta zona del castillo se ha decorado con elementos que evocan la época para mostrar cómo era la vida de la corte en el siglo XVI. Elementos que evocan, que no originales porque no hay mobiliario real francés del renacimiento debido a que la corte de Francisco I era itinerante, con lo que los muebles se armaban y desarmaban y prácticamente todos se perdieron; a las guerras de religión, de hecho en el castillo tuvo lugar el asesinato del duque de Guisa; y a cambios en las modas, en esto sí que desechaban los muebles de los reyes anteriores.
Durante las celebraciones del V centenario de la coronación de Francisco I (2015), el castillo recupera la biblioteca real. La colección de Francisco I tenía unos 1.800 volúmenes y fue en el castillo real de Blois donde se localizó el primer depósito legal de todos los libros de Francia.
El clasicismo, Gastón de Orleans
Gastón de Orleans se las prometía muy felices con su idea de convertirse en rey de Francia a la muerte de su hermano Luis XIII, que le regaló el castillo en 1626. Comenzó la ampliación del castillo, pero el nacimiento de Luis XIV acabó con el sueño y con el dinero. Tanto es así que quedó incompleto y tuvo que finalizarse durante la restauración del siglo XIX.
Hoy en día alberga salas de conferencias y exposiciones temporales.
Visitar el castillo real de Blois: información práctica
Puedes encontrar más información en la página web oficial del castillo real de Blois.
Horario: Abierto todos los días del año excepto Navidad y Año Nuevo, desde las 9.00 hasta las 17.30 (de enero a marzo), hasta las 16.30 (de abril a junio), hasta las 19.00 (julio y agosto), hasta 18.30 (septiembre), hasta las 18.00 (octubre y noviembre) y hasta las 17.30 (diciembre). De enero a marzo y en diciembre cierra al medio día de las 12.30 a las 13.30.
Precios: Adultos 12 €, incluye HistoPad (una tablet con realidad aumentada); reducida 9,50 €; niños (6-17) 6,50 € y menores de 6 años gratis.
Visita guiada incluida en el precio de la entrada (consultar horarios). Audioguía 3 €
La visita nocturna: el espectáculo de luz y sonido en el Château Royal de Blois
Durante el verano, el castillo real de Blois se ilumina por la noche. El patio de los cuatro estilos es el escenario perfecto para revivir la historia del castillo gracias a un espectáculo de luz y sonido que recrea los grandes momentos: construcción y ampliaciones, personajes importantes, luchas de poder…
Puedes reservar la entrada al castillo de Blois junto con el espectáculo de luz y sonido desde aquí.
Chambord nos había enamorado y Blois nos mostró la evolución de los castillos del valle del Loira en un patio monumental… no había hecho nada más que empezar nuestro viaje.
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