Las grandiosas alfombras de arena volcánica de La Orotava, de récord Guinnes

Cincuenta días de trabajo. Un equipo de veinte personas, la gran mayoría voluntarios. Más de novecientos metros cuadrados de terreno ocupado en la plaza del ayuntamiento de unas de las localidades con más encanto de Tenerife. Casi tres mil kilos de arena volcánica del Parque Nacional del Teide. Una veintena de tonalidades diferentes de arena, todas naturales. Mucho cariño, paciencia, dedicación, preparación, habilidad, genio artístico y devoción, bien sea a la religión o las tradiciones. Ésta es la fórmula mágica para la creación de una de las obras de arte efímero más singulares y sensacionales jamás concebidas. Sí, efímero, porque, al poco tiempo de ser acabada, se destruye para “renacer” el año siguiente cual ave fénix de sus cenizas… volcánicas. Son las alfombras de La Orotava.

La enorme alfombra de arena volcánica que decora el suelo de la plaza del ayuntamiento de La Orotava cada año con ocasión de la infraoctava del Corpus Christi tiene hasta récord Guinness. Es el tapiz de tierra más grande del mundo. Y nosotros tuvimos la suerte de hablar con el máximo artífice de esa obra de arte. Una de esas oportunidades casuales que te brindan los viajes y los hacen tan especiales… Si tú también viajas a la isla en el momento adecuado, acercarte a ver las alfombras de La Orotava tiene que estar en tu lista de cosas que hacer en Tenerife.

Las fiestas mayores de La Orotava, Tenerife, el Corpus Christi

Las fiestas mayores de La Orotava se celebran en honor al Corpus Christi, San Isidro Labrador y Santa María de La Cabeza. Es la celebración de Corpus Christi más destacada de Canarias –aunque la de la vecina San Cristóbal de la Laguna sea más antigua– y una de las más importantes de toda España, de hecho ha sido declarada fiesta de interés turístico nacional.

De todo esto nosotros, en nuestra “bendita” ignorancia, no teníamos ni idea cuando llegamos a la plaza del ayuntamiento de La Orotava un buen día de mayo. Buen día es un decir porque nos acompañaba la “panza de burra”, esas nubes bajas que cubren a veces el norte de de Tenerife y que son tan preciosas vistas desde el Teide –el efecto del “mar de nubes”–, pero no tanto desde abajo. Íbamos a recorrer una de las localidades con más encanto de la isla, según nos habían comentado, y sí, a pesar de nuestra “amiga” la burra barriguda, La Orotava no nos estaba decepcionando. Pero, llegados a la plaza del ayuntamiento, nos encontramos con unas feas carpas blancas que nos estropeaban la foto. Lo que nos pareció mala suerte se convirtió pronto en fortuna, en cuanto nos acercamos un poco más…

Bajo las carpas blancas había tres hombre sentados en unos pequeños taburetes encima de unos enormes dibujos hechos en tiza. Esparcían, sobre ellos, lo que nos parecían unos polvos de colores. Afortunadamente, íbamos acompañados de un guía que nos explicó qué estaba pasando ahí y nos sacó de nuestro pozo de ignorancia. Nos habló de las fiestas de La Orotava y de una de sus tradiciones, puede que la más singular: la de la creación de esas enormes alfombras de arena volcánica. Hasta nos enseñó fotos de las de años anteriores, exhibidas en el ayuntamiento. Pero no fue sólo él quien nos habló de esa bonita tradición: tuvimos la suerte de poder conversar un rato con uno esos hombres sentados en los taburetes que, por casualidad, era conocido del guía. Ese hombre resultó ser nada menos que el director de la Escuela de Alfombristas de La Orotava: Domingo González Expósito.

Las alfombras de flores y de arena volcánica de las fiestas de la Orotava: una tradición convertida en récord Guinnes

El guía nos contó el origen de esas alfombras de arena volcánica que dan la bienvenida en la plaza del ayuntamiento a la procesión de la infraoctava del Corpus Christi –para los profanos, como nosotros, se trata del jueves siguiente al domingo de la festividad religiosa del Corpus Christi, en 2017 es el 22 de junio–. Tan grande es la tradición, que este día se ha rebautizado “día de las alfombras” en La Orotava.

El Corpus Christi se ha celebrado en La Orotava casi desde su fundación, pero fue en el año 1847 cuando algunos miembros de una familia noble de la ciudad, los Monteverdes, realizaron por primera vez una alfombra de flores para celebrar el paso de la procesión del Corpus frente a su casa. Desde entonces, los “villeros” –la forma más común de llamar a los orotavenses– imitaron esta idea y, hasta hoy en día, en las calles del casco histórico de La Orotava se confeccionan alfombras de pétalos de flores con dibujos de escenas religiosas y motivos ornamentales para celebrar el paso de la procesión de la infraoctava del Corpus Christi.

Entre tantos tapices de flores, ¿por qué hay uno de arena volcánica? La verdad es que no se sabe con certeza. Lo que sí se sabe es que el primer tapiz de la plaza del ayuntamiento, un tapiz también de flores, se realizó en 1905, honrando la visita de la Marina Española a la villa. En 1919 se empezaron a elaborar las primeras alfombras de flores en la plaza del ayuntamiento para la festividad del Corpus, como pasaba en las calles aledañas.

Por las dimensiones de la plaza y el viento que soplaba ahí, en un espacio más abierto, las flores se volaban y las alfombras se estropeaban con facilidad. Así que se probó con otros materiales: desde legumbres a lapas –moluscos–, pasando por dátiles o pipas de eucalipto. No está muy claro en qué momento se decidió utilizar la arena volcánica de las cañadas del Teide, pero desde los años ‘40 se empezó a estandarizar su uso… hasta hoy en día.

Ahora los tapices, tanto los de pétalos de flores como el de arena volcánica, están declarados como Bien de Interés Cultural por el Gobierno de Canarias, han ganado el premio Guinness al tapiz de arena más grande del mundo y han viajado como embajadores de la villa hasta México o Estados Unidos. Incluso se quiere iniciar el proceso para que lleguen a ser declaradas Patrimonio Intangible de la Humanidad por la UNESCO.

El trabajo que hay tras las alfombras cada año

El trabajo de realización de los tapices está supervisado por el director de la Escuela de Alfombristas de La Orotava, el encargado de elaborar el diseño. Domingo González Expósito, nacido en Venezuela de padres canarios pero que vive en La Orotava desde adolescente, lleva ocupando esa posición nada menos que veintiséis años, que se dice pronto. Veintiséis años con el reto de hacer obras distintas y cada vez mejores o más sorprendentes que las de los años anteriores.

Domingo, licenciado en Bellas Artes, nos contó cuán importante es esa responsabilidad: se trata de las fiestas mayores de la villa, todos los ojos están puestos en su trabajo y no han faltado casos de directores que se hayan despedido por no llegar a tiempo o cometer algunos errores… A veces, basta con un simple desliz.

Nos habló también del proceso de realización de la obra. El tema, siempre religioso por supuesto, lo decide el párroco local. Este año, por ejemplo, el motivo es el discípulo misionero. De ahí sale el boceto que se vuelve a presentar al párroco para su aprobación final. Luego se recoge el material en el Parque Nacional del Teide y se prepara para su uso. Es la única actividad de extracción autorizada en el Parque Nacional y sólo se puede recoger material acumulado por la erosión natural –sin cavar o picar–, así que van acompañados de guardas del parque.

Al mismo tiempo, se coloca un toldo en la plaza del ayuntamiento para proteger la obra durante su realización. Luego el boceto pasa a ser dibujado en la plaza. En esa fase participan ya unos cuantos ayudantes, entre ellos Ezequiel de León, el profesor de la escuela municipal que también estaba trabajando cuando pasamos por ahí. Y, finalmente, hay que rellenar todos los espacios con arena.

Foto: Andrés Gutierrez

Un trabajo de unos cincuenta días y veinte personas, algunas de las cuales empezaron de pequeñas con Domingo hace 27 años. Casi todos son voluntarios por ello no les vimos de mañana, cuando pasamos nosotros: estaban en sus respectivos trabajos.

¿Problemas? De todo tipo: la falta de simetría de la plaza, los toldos que desde este año no permiten ver la evolución del dibujo desde lejos, el tiempo… Un trabajo así no podía ser fácil.

Pudimos ver también como el dibujo de este año empezaba a tomar vida. El Papa Francisco, un mendigo y un niño refugiado acompañan las figuras bíblicas: la actualidad también llega a las alfombras de La Orotava. Y hasta hay mensajes escondidos…

Todo ello, tras la fiesta, desaparecerá. “No te empeñes en que permanezca lo que por ser ya perfecto debe morir”, escribió la poeta cubana Dulce María Loynaz que le contaron en La Orotava. Buena forma de resumirlo, ¿no?

Puedes ver al alfombra de La Orotava de 2011 en alta resolución aquí.

El resto de celebraciones de las fiestas mayores de La Orotava, Tenerife, el Corpus Christi: el baile de magos, la romería chica y la romería grande

La celebración de las fiestas patronales de La Orotava es mucho más que sus alfombras de flores y de arena volcánica.

El jueves de la infraoctava la procesión del Corpus Christi pasa por las calles decoradas con alfombras de flores hasta la plaza del ayuntamiento, donde termina con un acto religioso.

El viernes es el día del baile de magos, un baile tradicional que invade las calles y plazas del pueblo y en el que todos los participantes visten el traje típico de los antiguos campesinos de La Orotava, los “magos” –llamados así por la “magia” que tenían que hacer al trabajar terrenos tan difíciles como los de Tenerife–.

El sábado es la “subida del santo” o “romería chica”, la procesión de los santos patronos, San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza, hacia su santuario. El mismo día se celebra también la feria de exposición del ganado, con la bendición de los campos y las reses.

Y el domingo se cierran las fiestas con la “romería grande”, la romería de San Isidro propiamente dicha. Hay mucha información en la web del ayuntamiento de La Orotava.

Una fiestas sentida por todos los villeros, sean o no religiosos, como nos repitieron todos los que encontramos… ¡Qué ganas de volver a La Orotava en fiestas!