Salzburgo es la ciudad de Mozart y su figura sigue muy presente más de 200 años después de su muerte. Nos vamos de viaje a Salzburgo buscando las huellas del compositor y contándote alguna curiosidad. ¿Te vienes?
La plaza de Mozart en Salzburgo, Mozartplatz, con la estatua de Mozart
El ciudadano más ilustre de Salzburgo no podía no tener una plaza dedicada a él y efectivamente ahí está, en pleno centro de la ciudad, la Mozartplatz. En ella se encuentra la primera estatua que fue dedicada al compositor, de las muchas que hay ahora por el mundo. Es del escultor alemán Ludwig Michael von Schwanthaler y se inauguró en 1842 en presencia de los dos hijos de Mozart. Su viuda Constanze no pudo verla acabada por poco: había muerto sólo seis meses antes, y su última casa estaba justamente en esa plaza.
La residencia arzobispal de Salzburgo y su sala de conferencias
La vida y la carrera de Mozart están muy ligadas al principado-arzobispado, de hecho el compositor estuvo a servicio del arzobispo durante más de diez años. En la residencia arzobispal de Salzburgo, la Salzburger Residenz –donde ahora se encuentra el museo Residenzgalerie Salzburg, literalmente “galería de la residencia de Salzburgo–, y más precisamente en su sala de conferencias, Mozart ofreció numerosos conciertos.
La catedral de Salzburgo y la fuente bautismal donde fue bautizado Mozart
En la catedral de Salzburgo, Salzburger Dom, es donde parece que fue bautizado Mozart. Así que hay una razón más para visitar esta maravillosa iglesia barroca. La fuente bautismal se encuentra al principio de la nave izquierda. Según otras fuentes, Mozart habría sido bautizado en la iglesia de la Trinidad –Dreifaltigkertskirche–.
La casa natal de Mozart en Salzburgo, Mozarts Geburtshaus
También hay museos dedicados a Mozart, por supuesto. Uno de ellos es la Mozarts Geburtshaus, la casa natal de Mozart. En este edificio vivieron los padres del compositor entre 1747 y 1773 y aquí, el 27 de enero de 1756, nació el pequeño Joannes Chrysostomus Wolfgangus Theophilus Mozart. Se pueden visitar las habitaciones originales de la casa ahora llenas de objetos relacionados con la vida del compositor, desde documentos a instrumentos musicales pasando por muchos retratos. Ahí vimos el primer violín de Mozart, un piano de viaje plegable –prueba de lo mucho que viajaba– y hasta un ¡mechón de pelo de Mozart! Aunque, por lo visto, no está probado que sea suyo.
La residencia de Mozart en Salzburgo, Mozart-Wohnhaus
Desde 1773 la familia Mozart, ya más acomodada gracias a sus dos hijos prodigio –¿sabías que la hermana de Mozart era también un genio tocando el piano desde muy temprana edad?–, se mudó a una casa mucho más grande en el número 8 de la entonces llamada Hannibalplatz, actualmente Makartplatz. Esta casa también ha sido transformada en museo, la Mozart-Wohnhaus, residencia de Mozart, y, entre los objetos que se exponen hay una colección de autógrafos de Mozart. Nosotros no tuvimos tiempo de entrar pero nos suscitó curiosidad el tema de los autógrafos, ya que la guía nos contó que nunca firmaba como Amadeus, nombre que salió de su primera biografía. Él firmaba a menudo como Amadeo –la versión italiana de Amadeus, versión latina de su nombre de origen griego Theophilus, o sea “amante de Dios” o “amado por Dios”–.
En esta residencia vivió hasta sus últimos días el padre de Mozart, Leopold, que está enterrado muy cerca: en el cementerio de la iglesia de San Sebastián.
La pequeña cabaña de la flauta mágica de Mozart en Salzburgo
Uno de los sitios más curiosos que vimos en Salzburgo es la la pequeña cabaña con aspecto de caseta de jardín en la que Mozart fue “recluido” por Emanuel Schikaneder para que acabara la música de la Flauta mágica –obra de la que este último escribió el libreto–, ya que el compositor estaba procrastinando.
Naturalmente Mozart no estuvo ahí todo el tiempo “recluido” pero sí que la ocupó. Eso sí, originalmente estaba en Viena. Ahora se encuentra en los jardines de Mirabell, detrás del Mozarteum.
La sala de conciertos del Mozarteum en Salzburgo
La fundación Mozarteum, una organización sin ánimo de lucro que gira alrededor de la vida y obras del compositor –asociada a la Universität Mozarteum Salzburg, la escuela superior de música de Salzburgo–, es la encargada de mantener los dos museos de Mozart y también la sala de conciertos Mozarteum, que se encuentra justo frente a la residencia de Mozart. Ahí, en su “gran sala”, Großer Saal, tienen lugar algunos de los conciertos que organiza.
Como curiosidad, la Orquesta del Mozarteum de Salzburgo –Mozarteum Orchester Salzburg– se fundó, junto con la escuela superior de música, en 1841, un año antes que la famosa Orquesta Filarmónica de Viena.
El Mozarteum es también el encargado de organizar, desde hace 60 años, la semana de Mozart en Salzburgo – Mozartwoche– que incluye espectáculos de ópera y conciertos de música de orquesta, de cámara y de solistas con grandes artistas de todo el mundo. Es en enero, alrededor de la fecha de nacimiento de Mozart, de la que este año, 2016, se han cumplido 260 años.
El otro gran evento del año dedicado a la música clásica en Salzburgo es el Salzburg Festival, en julio y agosto. No sólo hay obras de Mozart pero, por supuesto, siempre tiene mucho protagonismo. En cualquier caso, durante todo el año hay conciertos de Mozart en Salzburgo, por ejemplo en el Palacio Mirabell, en la fortaleza Hohensalzburg o en diferentes iglesias. En la página oficial de turismo de Salzburgo (en inglés) hay un listado.
El teatro de marionetas de Salzburgo y su flauta mágica
Si quieres asistir a una versión “diferente” de la flauta mágica, puedes hacerlo en el teatro de marionetas de Salzburgo –Salzburger Marionettentheater–, uno de los mejores del mundo. Nosotros fuimos pero a ver Sonrisas y lágrimas.
La abadía de San Pedro de Salzburgo, donde Mozart estrenó su misa en do menor
Otra iglesia más que tiene relación con Mozart es la abadía de San Pedro –Sankt Peter Erzabtei– donde estrenó su misa en do menor. Ahí, todos los años, para conmemorar el aniversario de su muerte, se interpreta el Requiem de Mozart en su honor.
El cementerio de San Pedro, Petersfriedhof, y la tumba de la hermana de Mozart
En el cementerio de San Pedro, Petersfriedhof, se encuentra la tumba de la música Maria Anna Walburga Ignatia Mozart, o más simplemente Maria Anna Mozart –cariñosamente, Nannerl o Marianne– la hermana de Mozart. Como curiosidad, está enterrada junto con Michael Haydn, compositor hermano de Joseph Haydn.
Además, en la Universitätsplatz, la plaza de la Universidad, hay una placa que indica la casa donde vivió Maria Anna.
Mozart dinner concert en Salzburgo: cena y viaje a la época de Mozart
Otro concierto diferente, en este caso con cena, es el “Mozart dinner concert”, en la sala barroca del que fue monasterio de la abadía de San Pedro. Recetas históricas, mesas iluminadas con velas y obras de Mozart interpretada por artistas vestidos con trajes de la época: un viaje a la Salzburgo de finales del siglo XVIII. Una atracción bastante turística y algo cara por la calidad de la comida –56€–, pero el ambiente y el concierto pueden merecerlo.
El Café Tomaselli de Salzburgo, frecuentado por Mozart y todavía abierto
En Café Tomaselli, en la céntrica Alter Markt, se encuentra ahí desde los tiempos de Mozart, de hecho el compositor lo menciona, diciendo que lo frecuenta, en algunas de sus cartas. ¿Qué te parecería tomarte un café donde lo hizo Mozart?
Los mozartkugeln o bombones de Mozart de Salzburgo: ¡los auténticos no son los que creías!
Toda la vida pensando que podía comprar los bombones de Mozart en Madrid o en el resto de España o del mundo y que tenían un envoltorio dorado y no, los originales sólo están en Salzburgo y tienen envoltorio plateado.
Lo descubrimos en el café-konditorei Fürst, en pleno centro de Salzburgo. El dueño de esa pastelería fundada en 1884, Paul Fürst, fue el inventor de las famosas mozartkugeln –literalmente “bolas de Mozart”, no pienses mal, en alemán no hay doble sentido–. En 1890, con motivo del centenario de la muerte de Mozart –que en realidad sería el año siguiente– inventó los famosos bombones redondos de chocolate negro rellenos de mazapán de pistacho y nougat, una especie de masa de turrón. Eso sí, el nombre mozartkugeln no se patentó y hoy existen muchas copias hechas a nivel industrial. Aún así, las auténticas mozartkugeln se siguen produciendo según la receta artesanal original, sin conservantes –por eso duran sólo unas 6/8 semanas– y no se exportan. Martin Fürst, bisnieto de Paul, sigue al mando de la pequeña empresa y tuvimos la suerte de encontrarle en su cafetería.
¿Cómo reconocer los bombones de Mozart originales? Sólo se venden en cuatro tiendas de Salzburgo, tienen envoltorio plateado con la cara de Mozart impresa en azul y el texto “original Salzburg mozartkugeln”.
Souvenirs inspirados en Mozart en Salzburgo: ¡que no falte de nada!
Se podría escribir un artículo aparte sólo sobre los souvenirs inspirados en Mozart. Desde los patos de goma para la bañera hasta pelotas de golf. En la tienda online de la Mozarthaus puedes ver algunos para echarte unas risas.
Hotel Mozart en Salzburgo
Como curiosidad, también hay un hotel Mozart en Salzburgo, el primero al que se le ocurrió se llevó la palma, aunque el sitio no tenga nada que ver con Mozart. Nosotros no nos alojamos ahí sino en el Motel One, en cualquier caso. Aquí puedes ver precios y disponibilidad de otros hoteles en Salzburgo.
Tour de Mozart en Salzburgo
Si quieres que te acompañen por todos los rincones ligados al compositor, como no, hay tours guiados de Mozart en Salzburgo. Aquí puedes ver precios y características actualizados.
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