Coge tu espada, tu yelmo y tu escudo, nos vamos a la Edad Media en el castillo de Belmonte y su torneo internacional de combate medieval.
Ya hemos dicho en más de una ocasión que, puestos a viajar en el tiempo, la antigua Roma y la Edad Media son nuestros momentos históricos favoritos –a nosotros no nos llama la atención vivir la II Guerra Mundial…–. Muchas veces te sientes transportado a la Edad Media simplemente paseando por calles estrechas entre edificios de piedra de la época. Un viaje que acaba en cuanto ves pasar un coche, descubres un cable de la luz que va de lado a lado o te cruzas con otro turista “temporal” armado con su cámara de fotos. Lo de los turistas es inevitable –nosotros mismos vamos con nuestra ropa siglo XXI y nuestra cámara– pero todo lo demás no lo encontrarás en el torneo internacional de combate medieval en el castillo de Belmonte.
El castillo de Belmonte, un castillo con mucha historia
Casi quinientos años de historia, y siempre en manos de la misma familia, tiene el castillo de Belmonte. Desde el Príncipe de Villena y Juana la Beltraneja hasta la emperatriz de Francia Eugenia de Montijo. Disputas, intrigas, acuerdos, guerras, bombardeos… la historia de España está tan ligada al castillo como demuestra el hecho de que se firmara en él la paz entre los partidarios de Isabel –la Católica– y Juana –la Beltraneja–.
La primera planta del castillo nos recuerda su origen en el siglo XV, mientras que la segunda nos muestra las modificaciones y mobiliario del XIX, cuando fue residencia de la emperatriz Eugenia de Montijo. Sin olvidar la armería del castillo, que cuenta con réplicas de armaduras de la época que no se pasan la “vida” colocadas en sus pedestales acumulando polvo. No. Se usan en las recreaciones de sucesos históricos y alguna tiene más de un golpe, prueba de cuando una espada o un mazo van más allá de la simple actuación.
No te voy a desvelar todas las curiosidades y secretos del castillo de Belmonte, porque una guía te lo contará mejor que yo. Pero te diré que una de las cosas que más llama la atención es la forma irregular de su patio, con paredes del siglo XV y del siglo XIX. Por si fuera poco, tiene ¡una chimenea! Sí, una chimenea en el patio del castillo. Ah, y no dejes de mirar los techos…
Por cierto, si la silueta o el interior del castillo de Belmonte te suenan, puede ser porque es famoso. Aquí se rodaron El Cid –el de Charlton Heston y Sophia Loren– y Los señores del acero –con Rutger Hauer–, entre otras películas.
Combate medieval en el castillo de Belmonte
En mayo de 2014, el castillo de Belmonte ya alojó el campeonato mundial de combate medieval. Un año después, del 10 al 12 de octubre de 2015, llegó el Torneo internacional de combate medieval y en 2016 ha vuelto con el II torneo internacional de combate medieval “HMB Europa Open Desafío de Belmonte”. Ha tenido lugar del 25 al 28 de agosto, con equipos y luchadores de nueve países: Dinamarca, Estados Unidos, Francia, Italia, Polonia, Portugal, Rusia, Ucrania y España.
Pero no se trata sólo de ver los duelos, las melés de cinco contra cinco, diez contra diez y hasta veintiuno contra veintiuno, hablamos de un viaje completo en el tiempo. Porque el combate medieval, además de ser un verdadero deporte de contacto –¡y vaya que hay contacto!– es también muy riguroso desde el punto de vista histórico. Las armaduras que viste cada luchador tienen que ser de un único periodo histórico y de una zona concreta, no encontrarás un yelmo del siglo XV y una pechera del XIV en el mismo combatiente, o una hombrera de Castilla y una greba francesa.
Antes de que pienses que será todo una coreografía, o que las armaduras serán imitaciones, deberías darte una vuelta por aquí. Auténticos golpes de maza, de espada o de hacha que hacen temblar a los espectadores sólo con el sonido y las marcas que dejan en los yelmos de los contrarios. Si el golpe es real, la armadura no puede dejar de serlo, hablamos de más de treinta kilos de acero que reducen la movilidad pero aseguran una “larga” vida en combate. Tanto es así, que es necesaria la ayuda de todo un equipo de apoyo, escuderos, para colocarse todas las piezas correctamente antes de comenzar.
Pero la historia no acaba en el terreno de lucha, continúa en el campamento medieval en el que viven los combatientes durante los días de competición. Allí, desde las tiendas hasta la comida mantienen el rigor. Los escuderos y los competidores visten ropa de calle, pero de calle de la Edad Media. Las comidas se sirven en cazuelas de barro y los tenedores brillan por su ausencia. Junto con los equipos, también están los artesanos medievales. Auténticos profesionales que fabrican las armaduras siguiendo las técnicas tradicionales, que confeccionan las ropas de calle o que cocinan con hogueras. Un verdadero mercado medieval en el que llevarse a casa de recuerdo armas y armaduras usadas en el combate medieval, productos de artesanía, ropa y comestibles medievales y típicos de Centroeuropa y de otras zonas del mundo de donde vienen los artesanos.
Tienes más información y venta de entradas en la web del castillo de Belmonte.
Un fin de semana medieval en el castillo de Belmonte
Comenzando con la visita teatralizada del castillo, siguiendo por los combates medievales, pasando por una comida en alguna de las muchas tabernas medievales que se construyen, disfrutando de las habilidades de los maestros cetreros y de sus aves rapaces… El fin de semana del 25 al 28 de agosto 2016, el castillo de Belmonte vuelve a sus orígenes, porque los torneos de a pie no son una invención de este siglo.
Durante la Edad Media el puesto de cada hijo estaba perfectamente definido: los primogénitos heredaban la propiedad y el más pequeño tomaba los hábitos. Los intermedios –los segundos– eran enviados a castillos con siete años con la intención de que se convirtieran en soldados, no siempre caballeros. Ser caballero implicaba tener caballo, escudero y muchos más gastos que no todos podían afrontar. Así que la cantidad de soldadesca a pie era tan grande que, cuando no había guerra, fue necesario inventar una manera de que pudieran ganar dinero para comer: bienvenidos a los torneos medievales. Como ahora, en aquella época los combatientes utilizaban armas sin punta ni filo. Puede que estemos ante uno de los primeros deportes de la historia, porque los gladiadores no se andaban con estos miramientos.
Si no puedes acercarte a ver el torneo, no descartes la visita al castillo de Belmonte y piensa que durante varios años seguirá alojando torneos internacionales y nacionales con todo lo que les rodea, permitiendo un auténtico viaje en el tiempo.
Los resultados del II torneo internacional de combate medieval de Belmonte
En total en 2016 ha habido seis competiciones oficiales: duelos de armas de asta, espada y broquel, espada y escudo y espada de mano y media; y batallas grupales de 5 contra 5 y 10 contra 10. Los ukranianos han sido, una vez más, los grandes triunfadores, haciéndose con 8 de las 16 medallas, 1o si añadimos la de las batallas grupales en las había un equipo mixto de Ukraina y Dinamarca (en la batalla de 5 contra 5) y uno de Ukraina, Dinamarca y Rusia (en la batalla de 10 contra 10). España se ha llevado 5 medallas: Antonio Madrid Díez se ha llevado la plata en el duelo de armas de asta; Victor Terron el oro en el duelo de espada y broquel y la plata en los de espada y escudo y espada de mano y media; y el equipo Union Almogavan se ha llevado la plata en la batalla de 10 contra 10.
El día que fuimos nosotros Antonio fue el gran héroe aclamado por el público… Pero cada batalla diferente, no nos perderemos la próxima.
